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España España · Madrid
Voto de OsitoF:
7
Romance. Drama. Ciencia ficción Clare (Rachel McAdams) ha estado siempre enamorada de Henry (Eric Bana), un bibliotecario de Chicago. Está convencida de que están destinados a vivir juntos, aunque no sepa cuándo tendrán que volver a separarse: Henry es un viajero del tiempo, con una rara anomalía genética que lo condena a vivir su vida en una escala de tiempo cambiante, avanzando y retrocediendo a través de los años sin ningún control. A pesar de que los viajes de ... [+]
6 de septiembre de 2011
8 de 9 usuarios han encontrado esta crítica útil
Películas de amor hay muchas… pero pocas tan románticas como ésta, muy pocas capaces de conmover como ésta y sólo una capaz de innovar: ésta, “Más allá del tiempo”.

Supongo que a estas alturas de la vida no es difícil hacer una historia de amor, lo difícil es que aporte algo a la humanidad, cuando un espectador media puede haber visto del orden de mil películas rosas de todas las formas y estilos, directas o enmascaradas detrás de rocambolescas historias y excusas. Pero mira por donde, a alguien se le ocurrió juntar el amor verdadero con los viajes en el tiempo y le salió redondo: lo normal es que en el 90% de los casos el resultado fuese una patochada con los viajes en el tiempo como una distracción que ocultase la típica historia de chico conoce a chica, blabla, chico se enamora de chico, blabla, tienen problemas, blabla, los superan, blabla y son felices. En el otro 10% el resultado suele ser lo mismo, pero causando indignación por lo torpe, la frívolo, lo ñoño o lo previsible que queda el resultado final.

¿Y si en el 100% de las veces el resultado es una patochada, entonces…? Pues “Más allá del tiempo” es la excepción que confirma la regla. La parte cronoviajera de la historia está cuidada, muy cuidada, para sorprender, innovar y resistir el análisis de cualquier experto en paradojas temporales (o por lo menos para dar que pensar un buen rato después de verla). Y enlaza fluidamente con el amor en su variante cotidiana, en lo incómodo que resulta para el día a día de una pareja estar rompiendo continuamente las leyes de la física, en como la adversidad fortalece una relación, en dar pie a miedos e incertidumbres que se superan de manera verosímil…

Muy agradable y emotiva. Por sí solas, individualmente, las historias del viajero temporal y el romance entre Eric Bana y Rachel McAdams (curiosa, aunque acertada, la elección del siempre serio, siempre en su sitio, Bana; McAdams da una lección de recursos interpretativos como quien no quiere la cosa), serían películas interesantes sería atractiva, aunque algún experto en mecánica cuántica y microbiología seguro que pondría alguna pega. Del modo en que se han combinado, ha salido una de las pocas películas capaces de sorprenderme en los últimos tiempos.
OsitoF
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