10 de diciembre de 2009
13 de 22 usuarios han encontrado esta crítica útil
Siempre me han dado igual las etiquetas y creo que todos seríamos más felices si pasáramos de ellas. Esto es "Nouvelle vague", está entre las diez películas más destacadas de este movimiento y es la segunda que veo de la lista. Pues bien, no voy a decir nada más: los conceptos de esa nueva sintaxis cinematográfica, su libertad y sus exponentes están en Wikipedia y además me da igual. De hecho he querido verla por su alta valoración (para mí altísima) y por la espectacular Jean Seberg. ¿Se puede ser más guapa? A parte de la belleza de esta chica con el pelo a lo garçon (ahí queda ese guiño) hay más, las triviales conversaciones de la pareja protagonista me han gustado, por lo que veo, más que a la mayoría. Esas rarezas del contenido, más "porque sí" que consecuencia de una lógica, me gustan. Desapruebo los cambios bruscos entre escenas y a un Belmondo para no ver más, ni gracia ni química ni nada... Y por favor!!! Eran los años 60, bien, otro mundo, pero ese exacerbado y frenético tabaquismo, ¿por qué? Le salía humo hasta a mi televisión...
Mi último apunte sobre la Nouvelle Vague es sólo para redirigir, o al menos intentarlo, a todos cuanto pueda a "Hiroshima mon amour", eso sí que vale la pena.
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