Krampus: Maldita Navidad es una película de terror con toques de comedia que se inspira en la leyenda alemana del Krampus, un ser mitológico que castiga a los niños que se han portado mal durante el año. Narra la historia de Max, un niño que pierde la fe en la Navidad al ver que su familia se resquebraja y que despierta la ira del Krampus, que atormenta a su familia con monstruos y pesadillas. Está dirigida por Michael Dougherty y protagonizada por Adam Scott, Toni Collette, David Koechner, Allison Tolman y Conchata Ferrell.

Tiene un tono oscuro y divertido a la vez, mezclando el terror con la sátira de las típicas películas navideñas. Los efectos especiales son buenos y los monstruos tienen un diseño original y aterrador. También tiene un mensaje sobre la importancia de la unión familiar y el espíritu navideño, aunque no es muy profundo ni novedoso. Tiene algunos momentos de tensión y humor, pero también tiene algunos problemas de ritmo y coherencia. Algunas escenas son demasiado largas o innecesarias, y otras son demasiado predecibles o absurdas. Los personajes son bastante estereotipados y no tienen mucho desarrollo. El final es ambiguo y deja algunas preguntas sin responder.

En conclusión, Krampus: Maldita Navidad es una película entretenida y diferente para ver en Navidad, pero no es una obra maestra ni un clásico del género. Tiene sus momentos de diversión y terror, pero también sus defectos y limitaciones. Es una película que puede gustar a los fans del terror y de la comedia negra, pero que puede decepcionar a los que buscan algo más serio o original.