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Voto de Miquel:
8
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Drama
Finales de los años treinta, Italia. Los Finzi Contini son una de las familias más influyentes de Ferrara: ricos, aristocráticos y judíos. Sus hijos, ya adultos, Micol y Alberto, tratan de crear un restringido círculo de amistades para poder jugar al tenis y celebrar fiestas, pero viven ajenos al mundo que los rodea. En ese círculo entra Giorgio, un judío de clase media que se enamora de Micol. Ella parece divertirse a su costa; incluso ... [+]
12 de abril de 2010
23 de 26 usuarios han encontrado esta crítica útil
Uno de los últimos films de Vittorio De Sica (1901-1974). El guión, de Vittorio Bonicelli y Hugo Pirro, con colaboraciones no acreditadas de Tullio Pinelli, Vittorio De Sica, Valerio Zurlini, Franco Brusati, Elio Katz y Cesare Zavattini, adapta la novela “Il giardino dei Finzi Contini” (1962), de Giorgio Bassani, galardonada con el premio Viareggio. Se rueda en escenarios naturales de Ferrara y de los alrededores de Roma (el jardín). Nominado a 2 Oscar, gana uno (película de habla no inglesa) y el Oso de oro (XXI Festival de Berlín). Producido por Artur Brauer, Artur Cohn y Gianni Hecht Lucari para Control Cinema, se estrena el 2-XII-1970 (Israel).
La acción dramática tiene lugar en Ferrara entre 1938 y 1943. Michol Finzi Contini (Sanda), de 21 años, estudiante de letras, es la hija mayor de una familia de la aristocracia financiera judía, residente en Ferrara, acaudalada, liberal, respetada e influyente. Tiene un hermano dos años menor que ella, Alberto (Berger), al que está muy unida. Es guapa, atractiva, inteligente, algo manipuladora, independiente y coqueta. Mantiene relaciones de amistad con Giorgio (Capolicchio) y Bruno (Testi).
El film suma drama, historia, guerra (IIGM) y Holocausto. Relata el prolongado y lento proceso de percepción por parte de una familia judía italiana de la opresión fascista del país y de sus crecientes tendencias racistas. Explora dos estrategias diferentes de adaptación a las circunstancias adversas: una es pragmática y colaboracionista y la otra opta por mantener con dignidad y discreción la independencia de criterio y los posicionamientos liberales y antiautoritarios. Establece comparaciones sucesivas a lo largo del tiempo entre los costes y beneficios de las dos maneras de proceder. Presta especial atención a los costes en términos de autoestima, amor propio y equilibrio personal.
Envuelve la acción en un ambiente enrarecido e inquietante dependiente de la evolución de la guerra y del rápido avance de las tropas nazis. La inquietud y la desmoralización de las dos familias se ven incrementadas a causa de las incertidumbres asociadas a las decisiones del mando alemán. Retrata con precisión el ambiente de presión popular contra los ciudadanos que no se identifican con la ideología fascista, la colaboración con la Alemania nazi, el culto a la persona del Duce, la exaltación de los jerarcas nazis y la apología de la violencia, el belicismo, el autoritarismo, la dictadura y la guerra. Es memorable la manifestación callejera de muchachos y muchachas a la carrera (a la manera de los “bersaglieri”) animados por camisas negras.
La acción dramática tiene lugar en Ferrara entre 1938 y 1943. Michol Finzi Contini (Sanda), de 21 años, estudiante de letras, es la hija mayor de una familia de la aristocracia financiera judía, residente en Ferrara, acaudalada, liberal, respetada e influyente. Tiene un hermano dos años menor que ella, Alberto (Berger), al que está muy unida. Es guapa, atractiva, inteligente, algo manipuladora, independiente y coqueta. Mantiene relaciones de amistad con Giorgio (Capolicchio) y Bruno (Testi).
El film suma drama, historia, guerra (IIGM) y Holocausto. Relata el prolongado y lento proceso de percepción por parte de una familia judía italiana de la opresión fascista del país y de sus crecientes tendencias racistas. Explora dos estrategias diferentes de adaptación a las circunstancias adversas: una es pragmática y colaboracionista y la otra opta por mantener con dignidad y discreción la independencia de criterio y los posicionamientos liberales y antiautoritarios. Establece comparaciones sucesivas a lo largo del tiempo entre los costes y beneficios de las dos maneras de proceder. Presta especial atención a los costes en términos de autoestima, amor propio y equilibrio personal.
Envuelve la acción en un ambiente enrarecido e inquietante dependiente de la evolución de la guerra y del rápido avance de las tropas nazis. La inquietud y la desmoralización de las dos familias se ven incrementadas a causa de las incertidumbres asociadas a las decisiones del mando alemán. Retrata con precisión el ambiente de presión popular contra los ciudadanos que no se identifican con la ideología fascista, la colaboración con la Alemania nazi, el culto a la persona del Duce, la exaltación de los jerarcas nazis y la apología de la violencia, el belicismo, el autoritarismo, la dictadura y la guerra. Es memorable la manifestación callejera de muchachos y muchachas a la carrera (a la manera de los “bersaglieri”) animados por camisas negras.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
La relevancia de los problemas de convivencia nacional y la evolución adversa de la guerra, contrastan con la descripción del ambiente de despreocupación, inconsciencia, apatía y frivolidad que envuelve a los jóvenes de la familia Finzi Contini, sus amistades y relaciones. Los muestra ocupados en jugar al tenis, al ajedrez, hacer excursiones en bicicleta, tener encuentros románticos, sostener discusiones banales y enredarse en disputas por celos, envidias, desaires y rivalidades nimias. La narración se sirve de la voz en off de un narrador. El período cubierto por el relato se amplía mediante 3 flashbacks, referidos a escenas de años anteriores (1932-33), que evocan recuerdos infantiles de Michol.
La cinta propone una análisis de las causas y efectos de la IIGM y una reflexión sobre los horrores de la misma, hecha con parsimonia, serenidad y sin rencor. Condena el racismo, el antisemitismo, el autoritarismo, el belicismo, el colaboracionismo y el fanatismo. Elogia los comportamientos basados en la dignidad de la persona. Profesa amor a la naturaleza, simbolizada por medio de un espléndido jardín, y a los animales (gran danés). Confiesa su amor a las letras, en especial a la poesía (Dickinson, Balzac...), y al cine. Explica su afición a la historia y la admiración que siente por los monumentos del pasado (Iglesias, calles, plazas...). De Sica conquista la atención y el favor del público del momento, que le corresponde con un éxito de taquilla. La obra es interesante, rica en emociones, desapasionada y lúcida.
La música, de Manuel De Sica (“El viaje”, 1974), hijo del realizador, acompaña el aire despreocupado, ocioso y alegre de los jóvenes, el lirismo de los recuerdos (“Recuerdos de infancia”) y el dramatismo de la persecución (“Persecución”) y la guerra (“Declaración de guerra”). Hacia el final, sobre los títulos de crédito, se ofrece el canto de “El Moleh Rachamim”, plegaria judía por una buena muerte. La fotografía, de Ennio Guarnieri (“Ginger y Fred”, Fellini, 1986), en color (eastmancolor), compone una narración visual impregnada de sentido estético y realismo impresionista.
La cinta propone una análisis de las causas y efectos de la IIGM y una reflexión sobre los horrores de la misma, hecha con parsimonia, serenidad y sin rencor. Condena el racismo, el antisemitismo, el autoritarismo, el belicismo, el colaboracionismo y el fanatismo. Elogia los comportamientos basados en la dignidad de la persona. Profesa amor a la naturaleza, simbolizada por medio de un espléndido jardín, y a los animales (gran danés). Confiesa su amor a las letras, en especial a la poesía (Dickinson, Balzac...), y al cine. Explica su afición a la historia y la admiración que siente por los monumentos del pasado (Iglesias, calles, plazas...). De Sica conquista la atención y el favor del público del momento, que le corresponde con un éxito de taquilla. La obra es interesante, rica en emociones, desapasionada y lúcida.
La música, de Manuel De Sica (“El viaje”, 1974), hijo del realizador, acompaña el aire despreocupado, ocioso y alegre de los jóvenes, el lirismo de los recuerdos (“Recuerdos de infancia”) y el dramatismo de la persecución (“Persecución”) y la guerra (“Declaración de guerra”). Hacia el final, sobre los títulos de crédito, se ofrece el canto de “El Moleh Rachamim”, plegaria judía por una buena muerte. La fotografía, de Ennio Guarnieri (“Ginger y Fred”, Fellini, 1986), en color (eastmancolor), compone una narración visual impregnada de sentido estético y realismo impresionista.