Bellísima película francesa que hemos podido degustar en el Festival de Donostia 2019, en su Sección de Perlas, no en vano venía precedida de su éxito en el reciente Festival de Cannes 2019, donde ha conseguido nada menos que el premio al mejor guión.
Y es que es un prodigio de narración, en cuanto a diálogos, silencios, miradas, música, pasión y mucho amor, en una época donde ciertos sentimientos (al igual que ahora, no nos vamos a engañar) se veían como pecaminosos o al menos enfermizos.
Una maravillosa película en cuanto a plástica y puesta en escena, con una soberbia fotografía y unas sensuales y matizadas interpretaciones, que logra interesar primero y conmover después, hasta llegar a su magnífico y emotivo final, un plano largo de excelente cine que nos deja pegados a la butaca.
Una cinta que te va envolviendo por su delicadeza y sensibilidad.
No obstante, dado su romo ritmo bien pudiera también aburrir a una (¿gran?) parte del público.
Pero merece la pena por su personalidad y su exquisitez.

https://filmsencajatonta.blogspot.com