La princesa

LA PRINCESA (2022) no trata de engañar a nadie, ni de trasmitir ningún mensaje profundo (fuera de que sería conveniente de que en los institutos se dieran clases de defensa personal a las alumnas por si es necesario poner en su lugar a algún besugo, porque soy firme partidario de las virtudes pedagógicas de una buena torta dada en el momento oportuno), ni de sentar cátedra, ni de contar una historia motivadora, ni nada por el estilo: es entretenimiento puro y duro en plan "La jungla de cristal" (1988) pero con aguerrida moza medieval en lugar de policía americano.

Así que si quieren pasar un buen rato viendo espadazos, peleas a lo burro (pero muy bien coreografiadas), saltos imposibles y escabechinas sangrientas varias dentro de un espacio muy limitado (la película se desarrolla principalmente dentro de un enorme torreón que parece sacado de un videojuego de plataformas), disfrutando por disfrutar de una peli entretenida con un refresco y unas palomitas en la mano en una tórrida noche veraniega, no lo duden, esta es su película. Le pongo un 6 por lo bien que cumple con ese objetivo.

Pero no le pidan más de lo que puede dar. Bastante hace la protagonista, Joey King, con mostrar sus aptitudes físicas y la ucraniana Olga Kurylenko con recordarnos a todos lo guapa que es (por cierto, el látigo es una chulada, voy a ver si lo encuentro en Amazon o en Aliexpress).

Lo que está claro es que se visiona como una película fresca y repleta de acción que resulta entretenida. Eso sí, el argumento es más básico que el mecanismo de un chupete, es pura acción "mainstream" al servicio de la hornada feminista tan de moda hoy dia.
Hay que decir que las peleas son de nivel alto, con unas coreografías muy curradas y una puesta en escena apañada. Recuerda un poco a ese videojuego de los 80 "Kung-fu Master", en la que el tipo iba subiendo zonas mientras se cargaba a gente, aquí pasa un poco lo mismo pero en vez de ir subiendo, va bajando.
Se agradece que las luchas son salvajes, evidentemente no a nivel de "El hombre del norte" o "Conan", pero al menos no son peleas "Disney" y contienen algo de sangre que le da ese toque gamberro. Ríete tu de "Tomb Raider" o "Black Widow".
Joey King se sale con su creíble actuación, por lo visto promete. Y tenemos también a una cuarentona Olga Kurylenko, aquí haciendo de villana, que como el vino, cada dia que pasa está más "buenorra".
Cinta de entretenimiento básico palomitero en la que hay que obviar sus grandes dosis de fallos y conveniencias de guión en la que lo único destacable son sus cuantiosas escenas de acción juvenil, realmente no tiene otro propósito, amén del ya dicho de ensalzar la imagen de la mujer guerrera y bondadosa.
Por cierto, los efectos visuales en relación a todo lo que tenga que ver con el fuego son verdaderamente lamentables.

Cuando te pasas 94 minutos a puros peleas con espadas, látigos, flechas y lo que encuentres a tu paso, dentro de un castillo el cual es atacado por una serie de hombres inútiles que caen ante la princesa que no es tan princesa, pero que también se cuestiona el por qué quizás no es una princesa normal.

En resumen, eso es lo que nos ofrece 20th Century Fox bajo el alero de Hulu o Disney según sea el caso. Una película extraña en su mayor parte que ni modo termina siendo bastante entretenida. No puedes evitar no caer en las tentaciones de espadas y combos sin razón alguna, pero que están presentes todo el rato en pantalla para terminar conquistándote.

La dirección del director vietnamita Le-Van Kiet impone su manejo al servicio de una pelicula y un guion que su gran virtud es darse golpes con espadas sin razón alguna contra una superlativa Joey King cargándose con su carisma correspondiente una película que mezcla artes marciales, con edad media y sangre por doquier. Resulta ser un grato momento disfrutar también de Veronica Ngo repartiendo golpes y flechas a la serie de inútiles hombres que los rodean. A su vez la película desaprovecha tanto a Dominic Cooper y Olga Kurylenko como los villanos de la función, merecían algunos mejores momentos de los cuales se les terminan entregando.

La película es otra más de las apuestas de establecer el nuevo pensamiento de libertad femenina y ese movimiento que cada vez se hace más presente en el cine. La verdad es que no molesta para nada aquel discurso, aunque en The Princess, quizás se le va un poco al extremo en marcar de tan fuerte manera la distancia entre uno y otro género. Un poco de mixtura, quizás era un punto mucho más efectivo dentro de la película.

Un blockbuster pensado para las plataformas de streaming y creo ciertamente que es el lugar indicado para una película como The Princess. No es del todo mala, gracias al siempre presente carisma de su protagonista y a que tenemos algunas secuencias de peleas dignas de destacar.

Esta película nos muestra una princesa muy distinta de las tradicionales de cientos de hadas. Mientras aquellas suelen ser frágiles y esperan la llegada de un héroe salvador que las rescate, la princesa de este filme parece ser alguien con la suficiente capacidad para derrotar a Jean Claude Van Damme o cualquier otra estrella de acción de los 80, 90 o de la actualidad.
La película es una sucesión constante de combates, sin que exista un argumento lo bastante sólido. Por intermedio de flash back se intenta aclarar la situación, aunque dicho intento es un fracaso rotundo. Una princesa experta en combate es una idea que debió desarrollarse de mejor modo; pudo dar para un producto de mejor calidad que éste.

Entretenidísimo drama medieval convertido prácticamente en una cinta de acción. Con un claro espíritu reiivindicativo sobre las injusticias y vejaciones, cometidas con las mujeres a lo largo de los siglos.

Una estupenda Joey King como "The Princess" (Me encanta esa expresión que suele mostrar Joey, picarona, sin duda es una comediante). Demostrando estar en una gran forma física para dar la talla en las innumerables escenas de acción y lucha, estupendamente coreografiadas, por otra parte.

Katherine Langsford debiera de tomar nota de como prepararse para una película de espadachines, para así no ir arrastrando el culo como hizo en "Maldita".

La película dirigida por Le-Van Kiet tiene momentos de auténtico Clímax, un torbellino orgásmico continuo.

Me he entretenido y divertido viendo "La Princesa", sin entrar en otro tipo de valoraciones, la película cuenta lo que cuenta y la cuenta como la cuenta.

Al principio pensaba valorarla con una baja nota, pero creo que su justa medida estaría entre un 5 o un 6. Insisto, sin querer entrar en otro tipo de consideraciones, yo me he divertido.