El calendario de Navidad

Aunque parte de un planteamiento algo original sobre un calendario de Adviento, en las formas y en el fondo no deja de ser una aventura romántica convencional, un producto de Netflix con aire totalmente de telefilm pero que a pesar de todo entretiene como película familiar para las fechas Navideñas.

Vista en una sesión doble con ¡Qué duro es el amor!, acabo empachado de navidad. Y es que esta producción me ha costado mucho acabarla, porque además de estar hecha con plantilla me ha resultado muy forzada en todo.

Abby es una fotógrafa atrapada en un trabajo que no le llena, sin suerte en el amor y con una familia algo peculiar. Cuando su mejor amigo Josh vuelve a casa por Navidad, todo parece mejorar un poquito. Y cuando su abuelo le regale un calendario de adviento que parece predecir el futuro, todo puede pasar.

Pero no. La verdad es que no pasa nada que no sepas de antemano. La trama no me interesa lo más mínimo, y las actuaciones me parecen (casi) todas muy flojas, siendo el culmen Quincy Brown, que está fatal. Su personaje tiene algún comportamiento que más que adorable le hace parecer creepy.

En todo esto solo saco en positivo a Ethan Peck, el Spock de Discovery. Aunque sale poco, al menos en sus escenas veo algo diferente.

Un pinchazo en toda regla, la acabé de ver por orgullo propio.

Para verla sabiendo que tiene un estilo a películas de Hallmark channel, es decir, es super familiar, para pasar el tiempo, ver con seres queridos luego de la cena o para sentir un poco de los sparks navideños que nos dan tanta ternura.
Kat Graham es una excelente actriz, y en esta película como en otros de sus trabajos siempre termina otorgando una gran performance, pero mucho no acompañaron varios de los personajes secundarios que la verdad fue como que sobraban por más de la mitad de la película.
No se puede ser hiper quisquilloso sobre una película navideña para ser honesta, todos sabemos que esperar. Algo para divertirnos, reírnos un rato y olvidarnos unos meses más tarde.