3-Day Weekend

Para que exista una película es bueno, y muchas veces necesario, que exista un guión, y la verdad es que aquí existe, simple pero existe. Se necesita también un director que sea capaz de plasmar en imágenes lo que está sobre el papel y justo es eso lo más importante y lo que aquí falta. Miren ustedes, colocar a los actores en el plano, mirando a cámara para que digan sus frases no es dirigir una película. Se necesita un productor que aporte su dinero para contratar actores, localizar exteriores y acondicionar interiores. En esta película el director es el guionista y el productor, y nada de ello realiza adecuadamente. ¿Y los actores? Parecen aficionados que se han reunido para interpretar una historia con muchas relaciones homosexuales, muchas miraditas y muchos besitos dentro de una casa que suponemos en un hermoso paisaje. Pero todo esto lo hacen mal, y creo que muchos actores de porno son mucho mejores intérpretes que estos ocho que aquí se reúnen para decir sus frases y tocarse, tocarse de forma muy falsa y pasearse por delante de la cámara luciendo el plumero que quieren disimular. Sinceramente, una pérdida de tiempo.