Haz click aquí para copiar la URL

El gran gorila

Aventuras. Fantástico En un viaje a África, un empresario del mundo del espectáculo descubre un enorme gorila de diez pies de altura, junto al que vive una hermosa joven que lo tiene de mascota. El empresario le convence para que vayan a Hollywood y allí presenta al gorila como "Míster Joseph Young de África". Obtiene un gran éxito como atracción de un club nocturno, pero algunos espectadores desaprensivos emborrachan al gorila lo que da lugar a una serie de conflictos. (FILMAFFINITY) [+]
Críticas 5
Críticas ordenadas por utilidad
12 de abril de 2006
10 de 12 usuarios han encontrado esta crítica útil
Obra del equipo que 16 años antes realizó "King Kong" y "El hijo de Kong". El director es Ernest Schoedsack y Merian C. Cooper el productor y el autor del argumento. Los efectos especiales, mejorados, son obra de Willis O'Brien, que cuenta con la colaboración de Ray Harryhausen por única vez. Obtuvo el Oscar a los mejores efectos especiales.

La acción se inicia en un país no determinado de la África subsahariana y continúa, 12 años después, en 1948/49, en NYC, LA y Hollywood (LA). Narra la historia de Jill Young (Terry Moore), hija del propietario de una plantación, viudo. Jill a los 6/7 años adquiere (1936/37) a dos nativos una cría de gorila a cambio de abalorios y una pila del padre. Años después, el promotor de espectáculos Max O'Hara (Robert Armstrong), de viaje por África, convence a Jill para que firme un contrato para trabajar ella y Joe en un espectáculo. El estrés de Joe, tras 17 semanas de trabajo, preocupa a Jill, que apoyada por su novio Gregg (Ben Johnson), proyecta el regreso a África.

La película dulcifica y humaniza el realto y evita el erotismo y los niveles de violencia de "King Kong". Mantiene sus elementos esenciales: gorila sacado de África, trasladado a EEUU para trabajar en un espectáculo, dominado por una mujer joven, movido a huir en busca de su hábitat natural, perseguido por la policía. La historia, pese a las semejanzas, es diferente y contiene relevantes elementos propios: carácter familiar del film, clima singular de suspense, crescendo dramático hacia un evento culminante imprevisto, ajeno al relato. Son escenas destacadas la lucha de Joe con una veintena de leones, los destrozos que provoca en el local y la intervención en el incendio de un orfanato. La estética reproduce el surrealismo del pintor Arnold Bocklin en los paisajes africanos y refleja en los americanos la de los primeros años de la Posguerra: afición al exotismo y uso de formas de inspiración aerodinámica (de avioneses y coches). La ferocidad espontánea de Kong, se sustituye por un arrebato de Joe provocado por factores ocasionales (lluvia de discos de cartón e ingesta de alcohol inducida con malicia).

La música sigue las pautas de Steiner en la obertura, el cierre y las escenas africanas. En las escenas americanas funde melodías de la época dentro del formato orquestal genérico. La fotografía pone énfasis en los lances cómicos y exalta la descripción de las luchas de Joe, el terror de los clientes, la huída del simio y el incendio. El guión ofrece una historia interesante y bien estructurada, pero falta de magia y ensueño. La interpretación de Armstrong es acertada y loable. Ben Johnson debuta en un papel de relieve. La dirección realiza una obra mejor que "El hijo de Kong", pero sensiblemente inferior a "King Kong".

Última obra de la trilogía de gorilas del equipo de "King Kong" (Schoedsack, Cooper, O'Brien y Armstrong)
Miquel
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
23 de octubre de 2016
3 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Estamos ante una película del año 49 que ganó el Oscar a los mejores efectos especiales. Esto ya es mucho, pero aparte tenemos una historia fácil cuyo principal interés es la gran expectación de lo que va a ocurrir.

Ni más ni menos es una película entretenida para pasárselo bien y hacernos abrir la boca de asombro. La película no se hizo para mostrar un guión ingenioso, ni para hacernos pensar, ni tan siquiera llorar.... este metraje se hizo para hacernos disfrutar y saltar del sillón con sus efectos, y quizás impregnarnos con la simpatía de Joe. Un cacho de pan.

Un crítico corriente le daría mucho menos puntos de lo que yo le doy. Pero dejo claro que excepcionalmente no voy a votar con el ojo clínino del juez, sino con el corazón de aventuras que llevo dentro y las grandes emociones que me causó en mi niñez.

Una gran película para aventureros y tolerantes con los tiempos cambiantes.
Ruben
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
8 de julio de 2012
4 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
La guapa Jill es dueña de un gorila llamado Joe, que la adora, porque ambos crecieron juntos en la selva. Max O`Hara, el propietario de un local de espectáculos en Hollywood, viaja a África y convence a la joven para que firme un contrato y actúe junto al gorila en su lujosa sala de fiestas.
Serían alabados en su momento los efectos especiales de Ray Harryhausen pero la película es de 1949 y anda que no he visto mejores efectos especiales en los años precedentes. Por lo demás, la película es más bien flojita salvándose únicamente la interpretación de Robert Armstrong como el simpático canalla Max O´Hara. Como Schoedsack no sabe a qué atenerse ni qué carta debe jugar -si la del drama o la de la comedia- nos ofrece secuencias absolutamente delirantes como la presentación de los forzudos que van a enfrentarse al gran gorila. Si a estas sonrojantes secuencias unimos las gansadas de la policía en la persecución final el resultado se acerca bastante a las infumables películas de los ínclitos Abbott y Costello.
el chulucu
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
25 de abril de 2022
Sé el primero en valorar esta crítica
Para mí es precuela de king kong (1933), Robert Armstrong antes de entrar en bancarrota y dirigirse a la isla calavera, era flamante dueño de un club nocturno en Hollywood... Sorprendido no esperaba encontrar tanto amantes al género fantástico retro, ¿será porque es una de las primeras producciones de John Ford?, o unos arqueólogos como yo... Y si, Terry Moore también sobrevive.

Las escenografías no son buenas, pero hagámosle cuenta que estamos en África, nuestra protagonista Jill Young adopta a su hermanito Joe Young, que fue el secuestro de la mascota de tarzan "Chita", decide solventar sus ingresos en la ciudad.

Un filme que tiene el honor en dar el primer por Óscar efectos especiales a su creador, Willis O'Brien, por cierto bien merecido, podría haber dado para más, pero callo en malas manos en guionista y dirección... Y si te preguntas si la he visto coloreado, debo responder un sí y la protagónica haciendo gala en Hollywood en rosado.
John
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
22 de noviembre de 2013
0 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Es dificíl negar que tan entretenida puede llegar a ser esta película que trata de resaltar tanto un mensaje significativo como el uso de efectos especiales de una manera desmedida. Es estímulante el trato que le dan a la historia a través de sus aspectos llamativos tan bien logrados a pesar de la estética tan rudimentaria que poseen. Su acción es absorbente aunque los argumentos algo débiles y flaquean a lo largo de la historia, los cuales adquieren fuerza tan solo con el espectáculo del gorila tan rigurosamente animado. El mensaje sobre la relación del ser humano con la naturaleza es evidente, pero pasa casi desapercibido debido al trato tan simple de la trama y al enfoque tan complejo de las secuencias de acción. No obstante, resultaría desconsiderado no atribuirle cierto valor, pues al fin y al cabo, es entretenida.
AlanKino
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow