Lo peor que se puede decir de esta película es que son 2 horas y media para contar simplemente los putadones que le van pasando a DiCaprio mientras intenta sobrevivir, y que esas 2 horas y media transcurren de forma lenta, con poco diálogo pero eso sí, con unos paisajes que te mueres.

Lo mejor que se puede decir es que aun así, la sigues con interés sin dormirte. Yo la vi a la hora de la siesta y ni pestañeé (que no las tenía todas conmigo).

¿Si es tan buena como para llevarse el Oscar este año? Para mí no. ¿Pero es buena al menos? sí sí, totalmente.

¿Se llevará DiCaprio el Oscar por fin? Pues esperemos, porque si con este papel no lo consigue, nos vamos y el último que apague la luz. De hecho, es posible que esta peli pase más a la historia por ser la película con la que DiCaprio por fin consiguió el Oscar, que por ser un peliculón que marque una diferencia.

Supongo que hasta ahora no le han dado el premio porque aunque el tío se sale en casi todas sus pelis, siempre hay algo en cada personaje que te hace pensar que psche, que está bien, el chaval lo borda... pero que sigue siendo muy "DiCaprio"

y en esta en cambio, no es DiCaprio, en esta solo ves a un tío pasándolas putísimas y lo cierto es que más realista no puede resultar. Ojo, y sin hablar apenas.

Tom Hardy también lo borda pero es que el pobre queda eclipsado por semejante monstruo interpretativo.

Lo único, eso sí, a mí me rayó un poco la india susurrando metáforas sobre árboles y tormentas cada dos por tres, esto ya lo vi en Pocahontas y no resultaban tan pesados.

En resumen, ni tanto ni tan calvo: se deja ver muy bien, no es la hostia en patinete, pero merece la pena verla en la gran pantalla y sobre todo ver la burrada de trabajo que ha hecho aquel chavalín que empezó siendo ídolo de quinceañeras y ahora es probablemente uno de los actores referencia que se recordarán a lo largo de la historia de Hollywood. Por mucho que a algunos les reviente.

La vi porque me la había recomendado un montón de gente y no sé si fue por eso precisamente por lo que me decepcionó tanto. Es sosa no, lo siguiente. Esperaba auténtica originalidad (eso decían) y no me pareció que tuviese tanta. Es una forma distinta de plantear el origen y la interacción de las emociones, pero... sigue siendo bastante simplista.

Toda la película resulta en general ñoña, tristona y apagada, seguramente porque no nos quitamos de encima al personaje de Tristeza, ese bicho al que le habríamos dado de tortas desde el minuto 1 (y eso que Alegría tampoco le va a la zaga en cuanto a cansina y odiosa).

El único salado, Ira. El resto no valen un mojón.

La película entera está teñida de un regustillo nostálgico-dramático que a pesar de su más que previsible y necesario final feliz para que los niños no salgan horrorizados del cine, hace que te pase una de dos cosas: o te empieza a resultar un truño inaguantable y la quitas, o te quedas frito y te echas una siesta, que fue lo que hice yo.

Se dejaron al personaje del Aburrimiento, ese no aparece pero está presente en toda la película.

Después de leer las críticas de aquellos que puntúan la película con un 5 o menos, compruebo que lo que ocurre es que no la han entendido.

Tan sencillo como eso.

En un primer visionado quedan muchos flecos por casar, sí. Y probablemente paradojas a las que Nolan no da respuesta, ni pretende darla. Y alguna que otra trampa de guión. Pero si llegas a entender hasta cierto nivel de complejidad, la aprecias. Otra cosa es que no la hayas pillado en absoluto. Será eso lo que le ha pasado a muchos.

Tiene algún punto majete para vertela un sábado por la tarde, pero se queda en un suspenso desde que ya en la primera escena te enchufan un avance de la colección de aspavientos que a partir de ese momento Meg Ryan no va a dejar de hacer en toda la santa película. Da igual el guión, los personajes o si está bien hecha, tú sólo puedes rezar por que te peguen un tiro rápido o mejor aún, que se lo peguen a ella.

Pues esto es la historia de un señor que se dedica a vengarse de una panda de malnacidos, pero lo hace así, psche, con la calma, como quien se toma un café pero dando escopetazos a la vez. Y yo que por el título me esperaba la venganza del conde de Montecristo, o a Michael Douglas perdiendo la cabeza en Un día de furia, quedéme como que no sabía si le faltaba chicha, o limoná.

La idea podía haber dado para más, pero en vez de hacer una venganza currada, de las que te haces cómplice del prota y disfrutas viendo cómo le da lo suyo hasta al apuntador... pues no, la cosa se limita a pintarnos a un señor que va dando tiros con la recortada o machetazos a discreción, pero con un Goya a la mejor pinícula, que eso siempre le da como más enjundia.