Mike Judge, creador de Beavis and Butthead, ha realizado un film coescrito por un tal Etan Coen (no confundir con Ethan Coen) en la linea de films desmadrados y atípicamente originales dentro de la comedia actual como lo era recientemente la adaptación a la pantalla grande de "Guia del autoestopista galáctico". Solo leyendo la sinopsis uno puede quedarse enganchado a la propuesta. Lo que sigue después al contemplar la película es un esfuerzo por no caer en la escatología, lo burdo, un intento de otorgarle a "Idiocracy" una frescura que en gran parte se consigue y en otra queda a medias. Presentando un futuro dominado por los estúpidos la amplitud de posibilidades es ilimitada y Judge juega bien las bazas cómicas aunque tampoco se salga de unos niveles formales más previsibles y conocidos. Es una comedia atípica y por tanto recomendable para entretenerse una hora y media. Probablemente sea otro de esos films a los que la gente vuelva mentalmente de vez en cuando y por lo tanto no caiga muy pronto en el olvido. Es el apocalipsis de la inteligencia.