Sin ser gran cosa, cumple con el objetivo de hacer pasar al espectador unas dos horas divertidas, mas allá de algunas partes bastantes irracionales del guion. Aquí encontramos a tres personajes que empujados por las circunstancias deciden unirse para conseguir una serie de elementos de gran valor (3 huevos de oro de Cleopatra) para venderlos por una suma millonaria. Así de simple se desarrollará todo el metraje en donde se irán sucediendo las diferentes aventuras con persecuciones, tiros que no matan a nadie, villanos bastante torpes y traiciones variadas de todo tipo. Dentro de esto debo decir que los tres protagonistas están correctos, a Dwayne Johnson no le podemos pedir demasiado pero cumple, Gal Gadot aporta su belleza y simpatía y Ryan Reynolds, por suerte no sobreactúa y debo decir que es el que aporta la cuota de comicidad en un film que cumple perfectamente para el único objetivo que se hizo: entretener.