Media votos
7,1
Votos
21
Críticas
9
Listas
0
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Mis críticas favoritas
- Contacto
-
Compartir su perfil
Voto de Vericles:
8
7,1
56.312
Western. Aventuras
Después del asesinato de su padre, Mattie Ross (Hailee Steinfeld), una chica de catorce años firmemente decidida a hacer justicia, contrata los servicios del veterano agente del Gobierno Rooster Cogburn (Jeff Bridges), borracho y excelente pistolero. Así ambos se ponen en camino y entran en territorio indio para dar caza a Tom Chaney (Josh Brolin) en compañía de LaBoeuf (Matt Damon), un ránger de Texas que busca al fugitivo por el ... [+]
2 de marzo de 2011
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
No entiendo mucho de westerns. Diría más: no entiendo nada de cine. Pero, “Valor de ley” es una película que me ha encantado.
Los personajes tienen magnetismo, la fotografía es simplemente bella y la historia engancha, apasiona. Más los habituales detallitos visuales e ironía fina que deja toda película de los hermanos Coen.
Puede que no llegues a creer que una niña de 14 años tenga esa sed de justicia (o de venganza) y que sea capaz de acorralar a un usurero y de lidiar con personajes y situaciones de pico en vena, pero da igual, empatizas con ella y su corte y sigues sus aventuras atento a cualquier detalle de los que te van a ir sorprendiendo a medida que el filme avance.
Diría que, veinticinco años después, y salvando todas las distancias, la película me ha producido un ramalazo similar y me ha hecho evocar a “La princesa prometida”. Que sí, que ya sé que no tienen nada que ver, pero la asociación de ideas ha dado esto.
En el lado negativo, dos puntos:
No puedo entrar en detalles, pero el final, el epílogo como si dijéramos, no me gustó demasiado. No veo parecido alguno entre esa mujer madura y la niña de boquita de fresa que un día fue, de ahí mi leve disgusto.
Y dos, ¿por qué no traducir “True grit” como “Verdaderas agallas”, tal cual se dice en la propia película?
Los personajes tienen magnetismo, la fotografía es simplemente bella y la historia engancha, apasiona. Más los habituales detallitos visuales e ironía fina que deja toda película de los hermanos Coen.
Puede que no llegues a creer que una niña de 14 años tenga esa sed de justicia (o de venganza) y que sea capaz de acorralar a un usurero y de lidiar con personajes y situaciones de pico en vena, pero da igual, empatizas con ella y su corte y sigues sus aventuras atento a cualquier detalle de los que te van a ir sorprendiendo a medida que el filme avance.
Diría que, veinticinco años después, y salvando todas las distancias, la película me ha producido un ramalazo similar y me ha hecho evocar a “La princesa prometida”. Que sí, que ya sé que no tienen nada que ver, pero la asociación de ideas ha dado esto.
En el lado negativo, dos puntos:
No puedo entrar en detalles, pero el final, el epílogo como si dijéramos, no me gustó demasiado. No veo parecido alguno entre esa mujer madura y la niña de boquita de fresa que un día fue, de ahí mi leve disgusto.
Y dos, ¿por qué no traducir “True grit” como “Verdaderas agallas”, tal cual se dice en la propia película?