En el año 180, el Imperio Romano domina todo el mundo conocido. Tras una gran victoria sobre los bárbaros del norte, el anciano emperador Marco Aurelio (Richard Harris) decide transferir el poder a Máximo (Russell Crowe), bravo general de sus ejércitos y hombre de inquebrantable lealtad al imperio. Pero su hijo Cómodo (Joaquin Phoenix), que aspiraba al trono, no lo acepta y trata de asesinar a Máximo. (FILMAFFINITY)
Magnífica, obra maestra de todos los tiempos, esta película me recuerda que la venganza aunque es un plato que se come frío merece degustarlo y digerirlo. Solo los mansos poseerán la tierra y no los cobardes que apelan a sus instintos mas bajos para conseguirlo.Maximo y Cómodo personajes antagónicos de esta historia y tan opuestos como el día y la noche, al primero honrarlo y al segundo repudiarlo. Reúne todos los ingredientes necesarios para encantar al espectador impecables actuaciones, escenarios inolvidables, poderosísima banda sonora y un guión genialmente concebido con frases memorables como esta " Lo que hacemos en la vida tiene su eco en la eternidad"......y Gladiador lo sigue haciendo.
Stingcita
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