Primero, la película me ha gustado mucho más de lo que lo que pensé en un principio, soy un gran fan del imperio romano y me parecía que la película no reflejaría bien la actitud de los antiguos romanos con numerosos temas, y la verdad es que ganaría bastante si la pusieran en su ubicación adecuada, es decir, la República de Roma después de expulsar a los reyes y no en un ambiente moderno y extraño.
Tampoco es que me hayan entusiasmado las actuaciones tan teatreras, aunque los actores son buenos y eso se nota.
Lo mejor son algunas frases realmente buenas y literarias (mérito de Shakespeare) , la tensión que consigue transmitir Ralph Finnes en algunas escenas y en definitiva lo bien que representa el desprecio de los nobles por la clase baja.