Bueno, parece que hacer biopics de cantantes está ahora de moda. Después de "Bohemian Rhapsody" y de "The Dirt", ahora viene "Rocketman", la biografía de Elton John. Tengo que reconocer que esta película parte con desventaja: siempre me ha gustado bastante Queen y aunque Mötley Crue no era un grupo que conocía muy bien, sí que forman gran parte de mi género favorito, mientras que nunca he sentido alguna admiración por Elton John. Aun así, la película consiguió mejorar a las dos anteriores.

Reginald Dwight (Taron Egerton) es un joven ingles que crece en una familia disfuncional: su madre es fría con él y su padre, a pesar de los intentos del joven Reginald, no le da ninguna señal de afecto. Reginald comienza a descubrir su talento con la música y acaba cambiando su nombre a Elton John con el fin de dejar todo su pasado atrás y comenzar su carrera en la industria musical.

Lo mejor con lo que cuenta "Rocketman" son los números musicales con canciones de Elton que se involucran en el interior de la trama y las grandes actuaciones. Contamos con un Taron Egerton que perfectamente está a la altura del Freddie Mercury de Malek y además un gran reparto de secundarios entre los que destaca Richard Madden.

El problema es que sus números musicales tienen una gran presencia en los primeros momentos de la trama, pero a medida que va progresando la película los va perdiendo y presenta una historia que no difiere de las dos biopics musicales antes mencionadas (descenso a los infiernos de los personajes), lo que la acaba haciendo un poco previsible. A pesar de ello, consigue cuajar un buen final.

Aunque no es muy superior a otros biopics como "Bohemian Rhapsody", "Rocketman" consigue un inicio por la parte grande con buenos números musicales y un final por lo alto, dando la sensación de ser un título más pulido que su competencia directa. Taron Egerton interpreta un papel protagonista de mucha calidad, lo que le puede acabar ganando algunas nominaciones.