Siguiendo la estela de triunfo de otros films de parecido calibre se nos brinda una irregular comedia que si bien no es todo descartable, porque se esmera en superar la mediocridad, es igual de previsible, con las mismas bromas de humor vulgar y grueso, y los mismos patrones de intentar entretener y destacar por su gamberrismo políticamente incorrecto.
La pareja protagonista se esfuerza por recrear sus papeles histriónicos y excéntricos, y nos brindan un mensaje desquiciado del mundo de las estrellas musicales y sus productores, lo cual seguramente no está nada lejos de la realidad, vista las biografías y las noticias referentes a ese mundo que podemos leer en los tabloides cada jornada.
Pero no es suficiente para cautivar el interés del espectador ni provocar el entusiasmo por un argumento que se adivina a cada paso, y por un final "made in hollywood", de ésos que no suelen ser reales ni plausibles, pero que quedan muy bien para redondear las historias desquiciadas como la que nos ocupa.
En definitiva, entretenimiento limitado y previsible, originalidad escasa y vulgar: repasar en dvd, que la crisis no es cosa de risa...