Bellos parajes nevados en una montaña donde una pareja de supervivientes de un accidente aéreo deben buscar por sus propios medios la forma de escapar a los elementos y a la propia montaña para recuperar sus vidas. No es una historia de amor, ni una comedia romántica, ni tan siquiera un drama, es una película sobre una catástrofe aérea y el instinto de supervivencia humano, donde además surge una atracción animal ante la desesperación de no sobrevivir al día siguiente.

Actores ingleses de postín, con Kate Winslet a la cabeza e Idris Elba, que cada día crece más en sus interpretaciones son la pareja de este drama dirigidos por Hany Abu-Assad donde se produce una mezcolanza de géneros de dudoso resultado. A mí, me ha gustado, pero me esperaba bastante más.

Con todo, creo que se merece un 6.