Veo que muchos se mosquean con el hecho de que todo haya podido ser un sueño, cuando eso, en realidad, no afecta a la trama presenciada durante los 85 minutos anteriores (con su final cerrado, vemos como Rhys Meyers le niega a Banderas ese 'final' que le pide), de los cuáles los previos al giro me han parecido verdaderamente insufribles. Primero la película tarda en arrancar, en los primeros veinte minutos no sucede absolutamente nada y luego comienza el despropósito:

Si Banderas es un asesino en serie sin escrúpulos, ¿cómo es que permite que ese charlatán se le meta en casa y le hostigue de ese modo? A la mínima que el otro le parezca agresivo lo podría haber echado y ya está. ¿No contaba con esto último el policía, verdad? Es decir, que tenía muy claro que el perverso Banderas iba a permitirle que le trate de ese modo, poniéndole el cuchillo en la garganta mientras dormía y todo. Las carreras por el bosque con la otra agente secreta también estaban planificadas al milímetro, nada podría haber salido de otro modo. Como no, Banderas se suelta hasta en dos ocasiones de los amarres que le profiere Rhys Meyers, y como colofón para la segunda escapada este último tendría preparada la escopeta con cartuchos falsos para que Banderas la cogiera y sorprenderle en el acto. Como no podría ser de otra manera. ¿Durante cuánto tiempo estaría haciéndose el despistado enfrente de la hoguera?, porque parece ser que también tenía calculado el momento exacto en el que Banderas conseguiría librarse de la cinta aislante y bajar...