Tras leer la sinopsis y escarbar por la red información sobre lo que tenía toda la pinta de ser una película india de terror con una televisión demoniaca, o algo así, como eje de la trama y no encontrar nada que me aclarara de que iba la cosa, me decidí a echarla un visionado, por aquello de ver cómo se las gastan en Bollywood con el género de terror.
Pues bien, lo que tenemos aquí es una farragosa (hasta el punto de que uno de los personajes a los 100 minutos de película y ante la explicación que el guionista pone en boca del protagonista de las sandeces sufridas hasta ese momento, exclama “esto esta muy confuso”), pueril e interminable (2 horas largas) historia de fantasmas sin una gota de terror, ni de sangre, a pesar de que todo gira en torno a la muerte a martillazos de una familia acaecida 30 años atrás (imagino que existirá algún código en Bollywood por el que no se podrán mostrar escenas sangrientas, ni medio sangrientas, que coño, ni siquiera un pelín sangrientas), con su par de videoclips musicales entre medias de la trama, unas actuaciones que al que suscribe se le antojan infumables, un guion demencial y absurdo y que solo recomiendo a curiosos impenitentes o doctos en las bondades y cualidades del cine Bollywodiano.
Ardo en deseos de leer alguna critica de esta película, para ver si mi apreciación es consecuencia de un acertado criterio o de mi nula capacidad de discernimiento ante algo que se sale del sota, caballo y rey.