El cineasta francés Jean Luc Godard alguna vez sentenció que “el cine no es el reflejo de la realidad, sino la realidad de ese reflejo”. Desde esta perspectiva comprenderemos el relato real o irreal de una historia, que arranca con el primer plano del General Hopgood mirando a la cámara y poco después el fracaso matrimonial del periodista Bol Wilton (Ewan McGregor) que lo hace ir a la guerra de Irak (aunque no es una película bélica).

Y en las conversaciones entre Lyn Cassidy (George Clooney) y el periodista, está el quid para averiguar la verdad. Para ello, el director nos habla en clave de sátira acerca de las guerras inútiles. Cuando escuchamos sobre los “espías mentales” y sobre todo, cómo convertir la docilidad en fortaleza, concluimos al igual que él: “Si el universo nos da una pista a seguirlo”.

De manera que si el film habla del famoso “proyecto MK ultra” de la CIA, a la larga también podríamos compararlo con “The Big Fish” de Tim Burton (aunque sin lo surrealista para entretejer historias). Ambos films nos relatan la capacidad de creación como contradicción de lo establecido (y sobre todo cuando se está en plan de guerra, aunque esta no exista).
Gonzalo Restrepo Sánchez (Film critic. Barranquilla, Colombia)