Es imposible no quedar con la impresión de estar viendo una de esas series del canal del ratón, con chistes que bien podrían usar las risas grabadas de fondo con las pausas típicas de sitcom americanas, sólo que intercaladas con escenas de acción (o más bien de aventura), y referencias al MCU.

Y aún así funciona. Si bien visualmente podría dar muchísimo más de sí (las escenas de Spiderman en la noche son feas de ver, y las de día no tan imaginativas), lo cierto es que el humor es de aceptable nivel, cuanto menos, toda la inmadurez que vemos en Peter es entendible en un joven de 15 años, y la historia es simple pero fluye muy bien.

Y si los aspectos "teen" de este Hombre Araña no convencen tanto a algunos, se puede disfrutar la buena introducción al Universo Marvel del personaje a través de su relación con Tony Stark, o más aún, el gran villano muy bien interpretado por Michael Keaton (y especialmente una genial escena específica con nuestro héroe juvenil). Aprobado.