Una película hecha a la medida del lucimiento de Javier Cámara. Ello es su virtud y a la vez su mayor defecto, por el hecho de ser al espectador difícil o imposible separar el personaje del actor. La historia es una road-movie a la española de un profesor en busca de un mítico John Lennon. La ambientación sesenteña está muy cuidada y resulta creíble sin estridencias. Hay una moderación a la hora de contar y poner en escena que evita caer en los tópicos, lo que es de agradecer. Las alusiones a la falta de libertad, a la miseria y al embrutecimiento son veladas, de modo que sólo se perciban si se tienen vivencias o datos de terceros. Los sentimientos amorosos y el erotismo está también tratado con delicadeza y acierto. La parte negativa sería la falta de verosimilitud de ciertas situaciones que explico en el spoiler.