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Voto de CuchiCuchi:
4
5,2
5.241
Comedia. Romance
Una simpática joven heterosexual (Aniston) conoce a un gay encantador (Paul Rudd) y le propone compartir piso. Pronto simpatizarán y se harán grandes amigos; pero los sentimientos que ella experimenta hacia él y un embarazo por sorpresa amenazan con destruir una convivencia casi ideal. (FILMAFFINITY)
16 de mayo de 2015
11 de 18 usuarios han encontrado esta crítica útil
¿Cuál es la situación ideal para una mujer en su vida personal? Yo no soy una mujer así que no puedo responder, pero esta película tiene su propia teoría:
1.- Madre de una niña cuyo padre, muy heterosexual y muy masculino, está apartado por completo de su educación –no de otras obligaciones- precisamente por eso.
2.- Emparejada con un tipo pusilánime que tiene pinta de no oponerse a nada y por supuesto carece de autoridad alguna con la pequeña. Eso sí, es un policía afroamericano, con lo que el débito marital no se resiente, aunque parece claro que se aguanta si hay dolores de cabeza.
3.- Íntima de un gay maravilloso, que es el hombre de su vida y al que la chiquilla llama “tío”. Todo el mundo sabe que los gays alcanzan niveles de comprensión en las relaciones personales que los heterosexuales ni siquiera sabemos que existen, y este aspecto es el punto crítico de nuestros conflictos permanentes con las mujeres.
4.- Miembro de una familia adinerada y pasablemente intolerante con sus elecciones vitales, no lo bastante para provocar una ruptura pero sí para que sirva de antimodelo de cara a la nenita.
Esto se supone que es el ideal femenino. Yo lo vería de otra forma, lo vería como una forma de tener a tres tipos a tu servicio para cuando los necesites, pero allá cada cual, claro. Mi mujer quedó encantada con esta película e incluso se permitió una actitud condescendiente al ver mi creciente gesto de fastidio conforme avanzaba el metraje.
1.- Madre de una niña cuyo padre, muy heterosexual y muy masculino, está apartado por completo de su educación –no de otras obligaciones- precisamente por eso.
2.- Emparejada con un tipo pusilánime que tiene pinta de no oponerse a nada y por supuesto carece de autoridad alguna con la pequeña. Eso sí, es un policía afroamericano, con lo que el débito marital no se resiente, aunque parece claro que se aguanta si hay dolores de cabeza.
3.- Íntima de un gay maravilloso, que es el hombre de su vida y al que la chiquilla llama “tío”. Todo el mundo sabe que los gays alcanzan niveles de comprensión en las relaciones personales que los heterosexuales ni siquiera sabemos que existen, y este aspecto es el punto crítico de nuestros conflictos permanentes con las mujeres.
4.- Miembro de una familia adinerada y pasablemente intolerante con sus elecciones vitales, no lo bastante para provocar una ruptura pero sí para que sirva de antimodelo de cara a la nenita.
Esto se supone que es el ideal femenino. Yo lo vería de otra forma, lo vería como una forma de tener a tres tipos a tu servicio para cuando los necesites, pero allá cada cual, claro. Mi mujer quedó encantada con esta película e incluso se permitió una actitud condescendiente al ver mi creciente gesto de fastidio conforme avanzaba el metraje.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
Pero es que además todo esto es una gran mentira.
Todo esto es la fantasía de un gay, el autor de la novela, sobre cómo le gustaría que fuese su vida si hubiese nacido mujer. Si eres una mujer y lees esto, me tienes que dar la razón, no te engañes.
Para mí, el único hombre que realmente posee dignidad en esta peli es el que interpreta el gran Nigel Hawthorne, que también es homosexual, para que no se me llame homófobo (y por supuesto que tengo amigos gay a los que adoro, etcétera, etcétera y todas esas gilipolleces que se dicen para disculpar esta clase de opiniones). Un tipo que no utiliza su superioridad cultural e intelectual ni para humillar a los que son más felices que él, ni para gimotear recitando versos, ni para ser un amargado detestable, ni un viejo verde que intenta engatusar a efebos con promesas de promoción social. Es la persona que más vale de todos los que salen en esta fantasía con diferencia. Y la única realmente sincera consigo misma.
Todo esto es la fantasía de un gay, el autor de la novela, sobre cómo le gustaría que fuese su vida si hubiese nacido mujer. Si eres una mujer y lees esto, me tienes que dar la razón, no te engañes.
Para mí, el único hombre que realmente posee dignidad en esta peli es el que interpreta el gran Nigel Hawthorne, que también es homosexual, para que no se me llame homófobo (y por supuesto que tengo amigos gay a los que adoro, etcétera, etcétera y todas esas gilipolleces que se dicen para disculpar esta clase de opiniones). Un tipo que no utiliza su superioridad cultural e intelectual ni para humillar a los que son más felices que él, ni para gimotear recitando versos, ni para ser un amargado detestable, ni un viejo verde que intenta engatusar a efebos con promesas de promoción social. Es la persona que más vale de todos los que salen en esta fantasía con diferencia. Y la única realmente sincera consigo misma.