A pleno sol

René Clément quiso crear un estilo de thriller tenso, perverso y retorcido para la Nouvelle Vague y aunque cuando pensamos en la Nueva Ola francesa de los 60 no pensamos en esta obra cumbre, lo logró.

No solo sobre las relaciones intensas de amor-pasión, sino sobre todo tipo de relaciones que se basen en el interés.

Además es una obra que sabe sacar la tensión sexual que respira la novela original de Patricia Highsmith.

De visualización necesaria para todos los cinéfilos.

Lástimosamente para los que ya hemos visto una infinidad de películas de thriller, entre clásicas y contemporáneas, desde el minuto 40 ya sabíamos cómo iba a acabar la película. A pesar de eso esta nunca pierde ritmo y nos mantiene atento y ese es un gran mérito de René Clément.

. El guión -basado en la novela de Patricia Highsmith- es lo mejor de la película, a parte de la hermosa fotografía que nos pinta la Italia y Francia desconocida, inalcanzable para los que aun no ponemos un pie en sus tierras. Para finalizar, las actuaciones fueron muy correctas.

Cine de Verdad, antológico, pausado, con los perfectos enfoques y la música adecuada.
Interpretaciones ajustadas, en ningún momento sobreactuadas, veraces y profundas.
Nos encontramos ante una verdadera obra maestra del Séptimo Arte, y en particular del cine francés.
La belleza física de Alain Delon con la podredumbre moral de su personaje resultan la mixtura perfecta para definir al Sñor Ripley, un villano antológico dentro del cine y la literatura del siglo XX.
Resulta increíble el parecido físico de los dos protagonistas, Delon y Ronet, lo cual trasladado al guión no deja de darle un impulso de perfección a la obra.
Los rodajes en escenarios naturales de Italia resaltan aún más si cabe toda la historia y todo el drama de este Talentoso y Malvado Mister Ripley.
Pellicula imprescindible.

Aburridísima intriga traída de pelos, que a diferencia de lo que sucede en el remake, no es capaz de atraerte en ningún momento con la versatilidad de las interpretaciones. Alain Delon sostiene la película con su perenne inexpresividad y ningún personaje muestra la suficiente fuerza como para dejar huella. La relación que Delon mantiene con Maurice Ronet ('El fuego fatuo') se muestra incomprensible y ridícula si no se tienen más antecedentes de la historia. La protagonista femenina también deja indiferente, al menos en el remake la Paltrow deslumbraba. No he sentido emoción en ningún momento a lo largo del visionado de esta cinta.