25 kilates

Hola foreros de filmaffinity!

No quiero realizar una crítica demasiado pulida de esta película, porque creo que no hace falta.

"25 Kilates" es una película bien hecha, nadie podrá decir lo contrario; ahora bien, para nada va a entrar en el limbo del cine español como una película 10 (como mucha gente comenta por ahí), ya que lo que se propone es un film de domingo por la tarde y palomitas, bastante sencillo.

Lo que ocurre es que estamos tan mal acostumbrados en España, donde (como producción nacional) casi solo presenciamos estrenos cada vez más decadentes de cine "cómico" o "de retrato social"; que cuando se presenta una película de características generales interesantes, la gente empieza a babear como si se hubiera inventado la bombilla.

Solo diré que ésta es una película que le gustará a quien le apetezca ir al cine a ver algo distinto, ideado y rodado en España, y eso para mí ya es agradable. Todo el equipo de trabajo parece que ha hecho correctamente sus tareas, y eso también es agradable; porque el resultado es muy positivo.

Siendo optimista, espero que le vaya bien en taquilla, para ver si así las productoras nacionales se animan a apoyar trabajos "más arriesgados" de autores españoles.
Siendo pesimista, es una pena que con cualquier cosa que destaca ligeramente de la media se genere tanto revuelo de premios, grandes críticas, y demás parafernalia festiva. Y es que así nunca dejaremos atrás la España del vino y la pandereta...

Saludos

25 kilates es una película de aquí diferente, entretenida, y (lo más difícil) bien resuelta. Pese a que el thriler no es mi género favorito e iba preparada para lo peor, me ha sorprendido gratamente.

Para ser su primera película de Amezcua y una producción independiente está muy lograda, con un buen guión en el que se mezclan acción, delincuencia, suspense, intriga, violencia, con ciertos toques de humor -y de amor- para aminorar la tensión…

Se rodó en la Barcelona profunda y parte de la historia de un cobrador del frac “sin frac”, que utiliza la violencia para sus fines. A destacar los trabajos de Aida Folch y Francesc Garrrido, que sale además muy guapo.

Enhorabuena al guionista y director, y a las productoras que han sabido aprovechar su talento.

Puede que darle un siete a esta cinta parezca demasiado, y tal vez lo he hecho influido por las auténticas porquerías infumables de idéntica nacionalidad que he tenido el placer de ver estos últimos días ("Mentiras y Gordas" y "Fuga de Cerebros", por más señas), comparada con las cuales, esta es una absoluta Obra Maestra. Naturalmente, lo de "placer" lo digo por lo relajado que se queda uno después de haber tenido la oportunidad de desahogarse describiendo aquí sus arcadas, sufridas asimismo por otros amantes del cine igual de concienciados que yo y que, por lo tanto, también aprovechan para despacharse a gusto en cuanto pueden mediante sus propias críticas, cuya lectura es una experiencia más que recomendable. (Gracias, Filmaffinity).

Sin embargo, por más que lo pienso, las virtudes de "25 Kilates" son muy superiores a sus defectos, que los tiene, pero quedan paliados por lo sumamente entretenida que es. Entretenimiento que se ha conseguido, simplemente, cambiando las tetas y culos de los versátiles actores de "Física o Química" o "Compañeros" por un guión coherente, de más de media carilla y que, para variar, pretende ofrecer algo de una mínima calidad a un espectador harto de que le tomen por imbécil.

La trama es ágil, más o menos creíble, nada pretenciosa y va al grano en sus escasos 85 minutos (y eso contando los títulos de crédito). Se trata de un thriller, género que no es nuevo en nuestro cine, aunque en el cual no solemos destacar (otro par de ejemplos de ello podrían ser "Días Contados" o "La Caja 507"). Tiene algunas reminiscencias de cine negro, aunque no pueda ser considerado estrictamente como tal, a pesar de contar con muchas de sus señas identificativas (los antihéroes con su doble moral, el gran golpe que puede solucionar todos sus problemas, la mujer fatal, los policías corruptos...)

A pesar de su aparente complejidad, es sumamente fácil de seguir y puede que resulte hasta un poco predecible, pero dudo que pretenda sorprender a nadie con ningún golpe de efecto ni giro argumental a estas alturas.

Como siempre, habrá opiniones para todos los gustos, pero a mí me resulta particularmente agradable comprobar que, de vez en cuando, algún producto nacional se atreve a nadar contracorriente, aunque, por ello, acabe siendo más conocido en el extranjero que aquí, como me temo que es el caso.

Lo peor, como casi siempre me acaba sucediendo con el cine español, es que hay momentos en los que me pregunto: ¿Por qué entiendo mejor a los personajes cuando hablan en catalán, si yo no soy catalán? Ah, coño, es que el catalán lo subtitulan. Eh, un momento. Siendo así, ¿por qué entiendo también sin mayores problemas una retransmisión en catalán que se oye de fondo cuando uno de los protagonistas está viendo la tele, si no está subtitulada? Ah, coño, es que el presentador vocaliza.

Es decir, que ahora que parece que vamos empezando a mejorar en los guiones y la realización, cuando aprendamos a hablar, vamos a ser la leche.

La opera prima del hasta ahora guionista Patxi Amezcua, se salda con una película de excelente factura, y en la que consigue no solo entretener y emocionar, sino que te invita a seguir confiando en el cine español. Y es realmente lamentable que esta gran película solo llegue a ser vista por una minoría, cuando actualmente hay un par de películas españolas de más que dudosa calidad, y que sorprendentemente están situadas en los primeros puestos de la taquilla.

Y metiéndonos en la trama, se trata de un thriller que pudiera parecer convencional, pero que a traves de las emociones que nos transmite sus personajes y que nos situan frente al espejo temas como la paternidad, el instinto de supervivencia o la corrupción policial, logran sumergirnos en una noria de acción contenida en el que todo encaja a las mil maravillas.

Mención especial para la fantástica actuación de Aida Folch que consigue transmitir al personaje de Kai una veracidad que solo se puede conseguir con una actuación realmente estelar.

Me ha gustado por varias razones; sus diálogos concisos y concretos, una trama bien desenvuelta, una planificación ágil dotada de buen ritmo que abandona sus posibles lastres, relegándolos.
Un buen grupo de actores que ejecutan su trabajo con profesionalidad y buen hacer, la convierten en un agradable pasatiempo que sobresale de la media.

Un merecido 7