Algún día un erudito del cine me dijo que “Superman” había sido sacada de la Biblia, al principio no supuse porque lo decía, pero después de analizar a fondo “Man of Steel” me di cuenta a ciencia cierta. (Dios Padre- Jor-El), envía a su único hijo a salvar la humanidad, (Satanás- General Zod) desterrado y sometido a un castigo eterno, (Jesucristo-Kal-El) Redentor y esperanza para el mundo y muchos más detalles en los cuales se podrá corroborar esta teoría. En cuanto a la película queda ese sinsabor de un film serio, un frenesí comercializado, el cual se destina y se empeña solo en hacer escenas estéticas de Sci-fi, escaseando en todos los demás aspectos en casi 2 horas llenas de baches (error en continuidad y arco de transformación del personaje).

La suerte como idea central de la película aborda el hilo narrativo magistralmente, maneja una elipsis soberbia que engancha al espectador en cuestión de minutos, dirección artística inestimable con locaciones de textura pulcra, geométricos movimientos de cámara conducidos por los diálogos omitiendo este como simple acompañamiento de los planos, arco de transformación del personaje súbito.

Deliberando que teniendo todos los ingredientes para llevarse una valoración inmejorable, considero que le sobro metraje al final, desconectando del realismo mediante un acto hiperbólico que subestima un poco la intuición del público.

Una fascinante puesta en escena que nos muestra Fincher, Estructura narrativa asombrosa que se va desarrollando entre los días que faltan para jubilar al detective Somerset (Morgan Freeman) y una serie de asesinatos inspirados en los pecados capitales, consiguen mantener el suspenso durante toda la proyección.

Con sucesos de cine negro, un asesino que obra con un amplio caudal de conocimientos (primicia), una locación de lujo que está sometida al encanto del director, como ciudad condenada, castigada y sin salvación, un reparto que nos enseña a un Brad Pitt (David Mills) en un papel irónico, tratando con afán de demostrarle a su reemplazo que es un detective cualificado e impredecible, discrepando con un compañero forjado con una sapiencia única e integra en su trabajo, resultado de una experiencia invaluable, creando un magistral contraste.

A medida que se van recolectando pistas, nos vamos creando falsas especulaciones sobre el asesino, sin despertar la mínima curiosidad por su identidad, pero tal asombro cuando este aparece, deslumbrándonos, llevándose todo el protagonismo del film y un desenlace magistral dejándonos atónitos, experimentando una tendencia hacia el morbo del psicópata.

No voy a contrastar esta película con ninguna, porque empañaría su reputación. Confieso que no entra en mis géneros de guiones preferidos, pero como titule mi critica, tiene algo que cautiva, aunque su influencia sea frágil. Mis puntos a resaltar:discursos buenos, elenco formidable, que no defraudan en su ejecución impecable y lo mas importante en lo que respecta a la puesta en escena, su ambientación.

recalco vehementemente que es una película para entretener a un publico acostumbrado a finales predecibles y repetidas escenas trepidantes de acción, no ha de tenerse en cuenta si el objetivo no es mas que es "Un delicado mordisco".

Seria muy inoportuno decir que Kill Bill es una película frustrada y que no consigue su propósito, aun mas falto de lógica reprochar al director si no reflexionamos su intención. La película en su genero es épica en todo el sentido de la palabra e incursiona robándose la ovación de un publico distinto.

Así que antes de deliberar un juicio apresurado, analice la razón que le asiste al film. No me enfrasque tanto en el argumento, ni en la peculiaridad de los personajes y concedí otro logro para el señor Tarantino.