Empecé viendo la película con unas expectativas bajas, era una película juvenil y encima española.

Me sorprendió que fuera fiel al libro y no como en otras películas como maravilloso desastre o after, donde los guionistas se limpiaron el culo con las páginas de los libros.

También me gusto la química entre los protagonistas y sobre todo la actuación de Nicole Wallace que defendió muy bien la película y tiene mérito porque era difícil.

La interpretación de Gabriel Guevara fue impresionante, me dejo sin palabras, que manera de cambiar de acento en cada escena, no sabía si era Antonio Banderas en el Zorro o Patricio María en una telenovela latina.
Aun eso hay escenas salvables, sobre todo cuando no hablaba y se dedicaba a interpretar solo con la mirada, se notaba que detrás había muchas horas de ensayo.

En el final de la película los guionistas estaban inspirados entre Fast and Furious y una película de secuestro de antena 3, porque cambiaron muchas escenas y se tomaron demasiadas licencias artísticas.

Otra adaptación de un libro juvenil que se han vuelto a cargar, han cogido el libro y lo han arrancado para crear una película que es un “completo desastre”, muy al estilo de after.

Entiendo las complicaciones de adaptar un libro a una película, pero no entiendo que si ha funcionado como best-seller tenga que cambiarse completamente.

Desde la primera escena de la película, vi que iban a reinventar la historia, para crear un argumento sin sentido en el que es imposible empatizar con los personajes, escenas de sexo que ni ayudan a crear interés en el espectador, otras escenas de humor que dan vergüenza ajena.
Y todo para crear una “comedia”, en la que quitan las mejores partes del libro y se inventan otras partes sin sentido.

Lo único salvable es la química entre los protagonistas, que me sorprendió para bien su actuación, aunque era imposible que ni el mejor de los actores levantará ese guion.

La mala sensación con la que salí de la sala de cine no se me va a ir en mucho tiempo.