Cuando no hay ideas, suceden estos despropósitos. George Miller ha desmitificado su Trilogía: Mad Max.
Me desborda tanto alboroto por la desmesurada violencia que posee este producto, así como el guion que es para "Premio Novel", ¿de la paz? No hablan, ladran. No parecen locos, lo están. Alucinante la respuesta ante tal oportunismo al remake y sobre todo, que se aplauda esto que envenena el porvenir humano.
Lo que engañan los tráileres y las críticas.
Pienso, ¿Si Stallone vale para Mercenarios, no valía para un colofón espectacular y maravilloso un Mel Gibson, que por edad y estado de forma, aun bordaría a Mad Max?
Arena, arena, mas arena y acabé chupando un caramelo porque me dejo la boca seca, el recuerdo dolorido y ni supe como encajarla, ni donde, ni como.
El cine que te gusta es el bueno, lo demás son chorradas. Pero hay chorradas que rozan la locura. En fin, Mad Max daba para mucho más.

Historia mítica, de cómo nació China. Con todos los tópicos sobre mitos y héroes.
Los héroes suelen morir para cambiar la historia en beneficio de los demás. Hay dos tipos de héroes: los que se recuerdan en la memoria (Dioses o semidioses) y los anónimos (seres humanos).
Correcta película, con alguna licencia fantástica.
Estábamos a 10 pasos pero… “Todo quedó unido bajo el sol”

Lo que hace muy buena a esta película, es el tratamiento de la historia.
Estamos sin duda ante un mito pero, un mito que se hace carne en héroes anónimos (seres humanos) que son capaces de derrotar a todo un ejército.
Tratamiento de los personajes más que correcto, evitando la fantasía, presentándolos como seres humanos de carne y hueso, lo que hace cobrar mayor realidad y vitalidad a la historia.
Infravalorada en comparación con otras películas que han tenido un mejor trato comercial.
Trágica desde su inicio, con un desenlace que roza con la locura. El honor, el amor, la lucha, el despecho, el valor. Un hallazgo que descubrí a precio de saldo y por casualidad.
Que injusticia.
La voy a resumir en una frase: “Voy a morir, se que voy morir pero, voy a morir como yo quiero: Luchando”

Sorprendido por la película de principio a fin. No sabía realmente que iba a ver, y… ahora estoy dentro del cubo.
Pensando, repasando mentalmente las situaciones y descifrando el pequeño gran mensaje que sale del cubo. Luego dicen que los medios y en especial el dinero es lo importante. No amigos, lo importante es la creatividad. Esta película puede parecer pequeña, pero es muy grande:”Una gran película”.

Hijos de los hombres toca el nervio óptico hasta el punto de aterrorizar con sus imágenes. El tratamiento visual es tal, que hasta las gotas de sangre entran por la cámara.
Por momentos pensé que yo estaba allí filmando la película.
¿Ciencia Ficción? Ojalá que solo sea eso. Caos, horror, terror, violencia, desesperación… la humedad que se respira en el ambiente te hiela la sangre.
Desde luego que desde México esta llegando un nuevo cine crudo y real, en el sentido que se hace palpable cuando lo visualizas. Yo me pregunto ¿es casualidad? ¿Tiene que ver con México?
Aristóteles decía que la Tragedia Griega, tras la catarsis, era purificadora de los espíritus. Pero, también sé, que en cierto modo somos lo que vemos y aprendemos. Espero que llegado el caso prevalezca el espíritu sobre la tragedia, porque es lo único que puede salvar a los “Hijos de las Personas” (ya va siendo hora que dejemos de emplear el término genérico hombre, cuando existe otro igual o mejor que es mujer).