Film que no deja mucho de qué hablar de la creatividad del productor, basada en la inestabilidad de una mujer que vive en la frontera y su obsesión de no tener responsabilidades como la de ser madre, cambia rotundamente su vida cuando se encuentra con un chico que pretendía robarle, inicia con el sentido de ayuda, volviéndose, después para Cecilia, una necesidad de protegerlo, hasta el grado de sentir celos de su progenitora, confusa por lo que cita en la película, de una mujer que le lee las cartas y le dice que encontrara a un hombre, que me parece absurdo que la mezclen con un niño.

De muy poco interés para mi gusto, carente de trama y sentido, solo es una vida de cualquier persona, llevada a la pantalla grande.

Queda ambiguo si Cobb termina en un sueño o en una vida alternativa, creo que muchos de los directores y guionistas no independientes dejan sus películas en términos de incertidumbre, generando en el espectador una serie de cuestiones sin repuesta, como la de ¿será posible soñar que las ideas en un sueño son más impactantes al ser ejecutadas como sentimientos y no como conceptos? Entre otras, el concepto del sueño es un tema profundo, como lo puede ser una pesadilla, pero si es verdad que el alma sale a vagar en busca de aventuras, no podríamos estar tan lejos del verdadero origen.

Las imágenes compensan lo burdo de la trama, de genero ficticio y de drama que realmente se deja percibir pero finalmente absurdos, tomando a Matrix como su libreto de inspiración para la creación de Origen, en términos generales, solo se pueden salvar los escenarios y la ficción en las tomas, porque del contenido la mente abstracta no tendría sitio aquí.