Un chaval instisfecho con su vida familiar se larga en direccióna Alaska, dejándose llevar por un ingenuo sentido poético de la vida, la naturaleza y la existencia.

Eso es lo que cuenta el film. Y transmite a menudo una sensación apacible no muy diferente a la de "Una historia verdadera", especialmente cuando su portagonista se topa con interesantes personajes con los que comparte experiencias.

Sin embargo, una cargante voz en off que trata de ahondar en la piscología del protagonista (francamente poco interesante) y una enorme cantidad de adornos esteticistas de corte videoclipero, en los que Penn quiere dejar claro que es un estilista de la imagen (y que hacen que parte del metraje transmita una idea de "¿Te gusta conducir?"), arruina parte de la historia.

Lo mejor: La Keener (qué gusto, esta mujer está siempre acertada) y los momentos más apacibles del metraje.

Lo peor: Todas las referencias poéticas y el abuso de cámara lenta.