Pongamos como precedente que no he visto la versión primigenia de este largometraje.

Para empezar, la extremada, yo diria enfermiza, educación, o mejor dicho, buenos modales de los "chicos malos" me resulta de un pedante de proporciones bíblicas. Que ni decir tiene que Michael Pitt parece que fué concebido únicamente para este tipo de papeles. Para resumir diré que nada más ver su cara en la película ya sabia que seria un chico malo pero muy educado. Su peinado de niño rico me revolvia el estómago. A Brady Corbet apenas se le ve una actuación digna en el film. Y quizás de eso peque esta película. Si me decidí a verla fué precisametne por sus actores, a priori, principales. Tim Roth y Naomi Watts. Pero al acabar la cinta me dí cuenta de que en realidad no se les ve. Tim Roth tiene un dialogo estúpido y poco creible, y Naomi Watts... mejor no digo que me parece mediocre... vaya, lo he dicho.

Por otra parte no dejo de darle vueltas a que, Funny Games me da un regusto de principio a final de una película de serie B. Hay tensión, pero parece que todo el guión se base en crear tensión, cosa de la que te hartas en la primera parte. Como todos esperamos toda obra tiene una presentación, un nudo y un desenlace, esta carece de ello. Y precisametne nada más comenzar, o bien yo soy adivino o se adivina como se va a desarrollar toda la trama.

En definitiva y para no caer en el spoiler diré que si haber visto la primera versión estoy más que seguro de que mejor haberlo dejado ahí y no malgastar el presupuesto en un remake tan soberibiamente malo. Y más aún tratándose del mismo director. Gracias a este remake no veré la original.