Will Smith nos volvió a demostrar en esta película que es uno de los intérpretes más populares de la actualidad, pese a algunos “tropiezos” recientes. Al respecto de ‘Soy leyenda’, y pese a mis temores iniciales, Will cumplió sobradamente con su buena interpretación de Robert Neville. En este aspecto la película estuvo muy beneficiada por su presencia.

Otro aspecto digno de ensalzar de la película fueron los decorados. La primera escena que vemos al iniciarse el film se queda grabada en nuestras retinas: una Nueva York totalmente desolada, destruida por todos lados, con hierba y maleza donde antaño circulaban los coches, a la vez que totalmente deshabitada. En este aspecto la película supo recrear bastante bien como sería una ciudad deshabitada (muy al estilo de la Inglaterra de ’28 días después’ que ve el protagonista al despertar del hospital).

La parte más floja de ‘Soy leyenda’ la encontramos hacia el final. Todo sucede demasiado deprisa, a veces incluso parece demasiado forzado, rodado o con demasiadas prisas o sin tener claro como concluirlo. Las situaciones absurdas son muchas más de las que cabría esperar. Y no sólo eso, sino que varios cabos sueltos hacen acto de presencia. Otro tema que podría haber sido mejor es el trato que le dan a los infectados, al que le veo dos grandes defectos: el primero no es otro que su recreación mediante unos efectos no demasiado creíbles y el otro defecto fue el hecho de mostrarlos muy abiertamente en vez de tratar de ocultarlos un poco más.

En definitiva: 'Soy leyenda' fue un destacado trabajo del director Francis Lawrence que aquí alcanzó cotas de entretenimiento que no deberían decepcionar a nadie.

-Lo mejor: Will Smith. La recreación de una NY totalmente abandonada a su suerte.

-Lo peor: El tema de los infectados y su exposición visual en el film.

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