Posee ese aroma del cine clásico, al tiempo que ofrece elementos novedosos, como esa construcción de la historia desde un ángulo distinto, con un admirable protagonista que gestiona el conflicto de manera sencilla, a la vez que poderosa.

La ambientación supone una pieza o factor mas dentro de la propia trama... y la búsqueda del tesoro, el catalizador que mantiene el interés, aún desentrañando de antemano como se resolverá.

Secuencias alegóricas para explicar necesidades, también anhelos... cada uno mantiene su particular hallazgo, y ello no significa que allí coincida el propósito final de la propia exploración.