Acabo de volver a verla después de muchos años, y me ha trasladado a la década de los setenta, cuando la vida fluía de manera muy distinta a como lo hace ahora. Aquellos grandes vehículos, las amistades comprometidas, el comportamiento de los hombres con las mujeres, y estas a su vez con ellos...

Resulta tranquila pero no lenta, su argumento es sencillo pero en absoluto banal. Martin Scorsese nos enseña como construir una hermosa historia con elementos comunes, amparándose incluso en la cotidianidad.

Ellen Burstyn logró un Oscar. Papeles secundarios para Kris Kristofferson y la jovencísima, y ya brillante, Jodie Foster.