Netflix estrenó a mediados de Julio esta serie creada por los hermanos Duffer, pero si me dicen que la han hecho entre Spielberg y Carpenter, me lo creo.

En los años ochenta un niño desaparece en un pueblo de EUA bajo misteriosas circunstancias. Su familia y amigos los buscan poniendo el pueblo patas arriba mientras van apareciendo nuevos personajes cargados de intriga como el científico cabrón, el monstruo y una niña con poderes.

Poco más podemos hablar de la trama sin desvelar nada de Stranger Things, que es básicamente E.T (1982) mezclado con una peli de terror de los ochenta. La serie es un homenaje a esas películas, tanto las de aventuras con niños como los Goonies (1985) como las de miedo, recordando a Super 8 (2011) pero siendo más oscura y sobretodo, mejor.

Los personajes son lo que eleva la serie. Obviamente hay algunos planísimos como el científico malo y algunos polis pero por lo general Stranger Things dota de personalidad a la mayoría de los que están involucrados en la historia. El policía, el joven guaperas, la virgen, etc. Todos parecen reales y, en menor o mayor grado, se alejan del cliché del que parten.

Y es que la calidad de las interpretaciones es destacable teniendo en cuenta que hay muchos niños en el reparto, pero precisamente son los que más lo bordan. Especialmente el grupo formado por el gracioso sin dientes, Carl (The Simpsons) y un niño con una pinta bastante rara, pero la mejor sin duda es Eleven cuya interpretación es conmovedora.

Amistad, familia, ciencia ficción y una BSO espectacular es lo que nos regala en ocho capítulos esta serie que hemos disfrutado este verano como si se tratase de un refresco en un chiringuito.

Os dejamos con las declaraciones de Reed Hastings, director ejecutivo de Netflix, que despeja las dudas sobre la continuidad de la serie: “Seríamos tontos si no hiciéramos una segunda temporada”.

https://cinefalos.com/2016/08/12/stranger-things-temporada-1/