Nos encontramos con la película más fiel a su libro correspondiente, el es Harry Potter más oscuro y terrorífico. Aquí es donde notamos el cambio bastante perceptible de los actores, mucho más maduros, se encuentran en una situación nueva, ajena a la trama de las dos películas antecesoras, un misterio envuelto en una atmósfera lúgubre atrapa a los personajes principales. Si analizamos objetivamente puede ser la mejor con respecto a términos puramente cinematográficos. Alfonso Cuarón muestra el mundo de los magos como debe ser, con una dirección bastante notable en la que se aplica perfectamente a la florecimiento de los ya no tan niños. Pudimos ver que en las dos primeras la dirección era más infantil (no quiere decir que sea mala, sino todo lo contrario) debido a que los protagonistas eran más pueriles. En esta tercera parte, los tres personajes principales están muy bien interpretados por los actores, pero en especial, Emma Watson es la que se come la pantalla ella solita y ahí fue cuando se pensó que esta chica tenía un buen futuro por delante. También contamos con un muy buen Michael Gambon en sustitución del gran Richard Harris fallecido antes del rodaje.
Con esta entrega, sigue la calidad y la magia del gran cine de aventuras. No dudes en verla.