La verdad es que deja una impresión extraña, a veces parece que va en serio, a veces parece que quiere ser un Sensación de Vivir con ínfulas intelectuales. En ocasiones es aburridamente políticamente correcta, blancos malos, negros protestando contra la opresión, y de repente le dan un toque irónico, interesante con aspecto de salirse de la postura maniquea, aunque al poco, vuelve a los clichés, y los chistes fáciles sobre películas y personajes famosetes y el tema racial.
Todo rezuma contradicción, drama prefabricado con situaciones forzadas y otras que te dejan con cara de ¿pero de que me hablas? Negros y blancos ridículos, que no parecen estar estudiando sino (paradójicamente) en una película americana de universidad en la que hacen de todo menos ir a clase... cómo no.