Esta secuela parte y se basa en los aciertos / errores de su precuela. El carisma de su protagonista es tremendo y acaparador. Estamos ante una estrella con todas sus letras, capaz de echarse a la espalda no un blockbuster, sino una trilogía que está batiendo records en taquilla; y eso es mucho (sobretodo por ser actriz, no nos engañemos... )

Por otro lado, y exceptuando a este huracán hecho actriz, la cinta entretiene y emociona lo suficiente, es decir, lo mínimo; pero eso ya es bastante. A esto hay que añadirle que nos encontramos ante uno de los últimos trabajos de Phillip Seymour Hoffman, y que los efectos visuales están al nivel de su presupuesto.
Sin embargo entretiene y emociona bastante menos que la primera parte de la tri (cuatri) logía... La primera hora casi que es tremendamente aburrida, y el romance protagonista es todo menos creible. Aceptable continuación, no perdurará en nuestra impronta, pero tampoco nos espanta en espera de la conclusión.