Si te gusta la música y las hay canciones que forman parte de tu vida, esta película te va a gustar. La trama es mas absurda que la mayoría de formulas conocidas. Es arriesgada y da una vuelta de tuerca a las películas de persecuciones y de coches. Parodia un poco las películas tipo Fast and Furious, no se toma en serio a si misma con un humor muy particular, a golpe de temazos, muy en la linea de otras películas que he visto de Wright.

Es muy difícil empatizar con el protagonista, Baby un niñato medio autista con buen corazón, bien interpretado por Ansel Elgort. Un adolescente de películas de otro tipo de películas, puesto entre ladrones profesionales con calzador, pero a pesar de la excusa poco creíble, la historia de amor entre los dos jóvenes inadaptados redondea la trama, es la única parte creíble, el amor, el de Baby por su madre, por su chica, por su padre adoptivo y hasta por su despiadado amigo, un Kevin Spacey ahora caído en desgracia y en el que sera uno de sus últimos papeles.

Las dos protagonistas femeninas, bellisimas las dos aunque igual de estereotipadas que el resto del reparto, a excepción del adolescente rarito.
Jamie Foxx, hace un buen papel y le da calidad a la cinta en el papel de loco peligroso. Jon Hamm tiene un papel interesante compartiendo su afición por la música con Baby y su condición de enamorado.

Sigue un poco la linea de las ultimas películas de acción británicas, pero prefiero las de Kingsman. Puedo entender la puntuación alta que tiene en esta pagina. Al igual que Alta fidelidad, si eres un melómano, esta cinta es para disfrutar de las imágenes y de la banda sonora. Para algunos es mas fácil ponerle una canción a a todo, a mi me pasa y a Mark Twight también le pasaba en su libro Besa o mata.

Opino que es interesante, pero esta película no es para mi, aunque tiene mucho ritmo.Lo mejor de todo, los primeros 5 o 10 minutos, después ya nada es igual. Quizás sea una de esas películas que cuando acaba hay que verla otra vez para pillar los matices.