Como todos sabemos, hay una serie de normas básicas que habría que seguir a la hora de ver una película de terror, las cuales yo no pude seguir la primera vez que vi esta concretamente. Algunas de ellas son las siguientes:

-Verla preferiblemente solo. Si estás acompañado asegúrate de que la persona con quien la ves sea alguien que se asuste y se quede callado con facilidad, no el cachondo mental de turno... (yo la vi con mi hermano)
-Si tiene que haber luz, que sea muy poca. Mejor si estás completamente a oscuras. (esta la cumplí jeje)
-Importante: Asegurate de que nadie te vaya a molestar durante las prócimas dos horas. (no veas como jode que llegue tu padre, tu madre o tu hermana cada dos por tres... y si hay visita inesperada más)

Consecuencias de verla en este plan: no te da miedo, te pasas la mitad de la película riendo, te machacan el climax continuamente... vamos que no la disfrutas.

Respecto a la película, se trata del cine de terror que a mi me gusta. El director consigue desde el primer momento crear una atmósfera de angustia, y luego mantenerla, lo cual no es nada fácil. No tiene por qué haber grandes cantidades de sangre para que de miedo (cosa que los americanos deberían comprender de una vez...). Tampoco es necesario enseñar al bichito malo muchas veces ni completamente. Favorece a la imaginación y hace la historia más imprevisible. Interesante y muy original. Las maldiciones todavía no han pasado de moda.

Hace bastante que no disfrutaba con una película de terror. Su versión americana al lado de esta es vergonzosa. Si no fuera por "Alien, el octavo pasajero", diría que es la mejor película de terror que he visto nunca.