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Voto de Ferdydurke:
8
7,4
19.818
Western
Un grupo de colonos buscadores de oro se establece en un lugar de California, pero sufren el acoso de los hombres de Lahood, el propietario del resto de las explotaciones mineras. Pero un día al poblado llega un misterioso y frío predicador (Clint Eastwood) que se pone de parte de los colonos, y comienza a enfrentarse al temido cacique local. (FILMAFFINITY)
30 de septiembre de 2016
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Western sobrenatural.
Biblia y revólver. De lo sagrado a lo profano. Del amor y la muerte.
Acerado, hondo, hermoso cuento de venganza y bondad. Recordaba la buena trama, las bellas líneas generales, pero esta vez me sorprendieron mucho los buenos diálogos, todos en los que aparece el villano minero están muy bien escritos; la osadía sexual de las dos mujeres tan obnubiladas, directas y sin prejuicios, hoy dirían que están empoderadas jaja; y lo bien resuelta y acabada que está, casi perfecta en verdad.
Quizás cierta tendencia a la caricatura y la exageración, al maniqueísmo infantil, nos impidan considerarla una obra maestra, pero son pequeñas pegas que no vienen al caso cuando todo está tan bien contado y es, a pesar de su origen conocido, una historia sorprendente y arriesgada que se aleja con valentía del molde o matriz inicial y que mezcla elementos antagónicos con mucha destreza y pericia.
Biblia y revólver. De lo sagrado a lo profano. Del amor y la muerte.
Acerado, hondo, hermoso cuento de venganza y bondad. Recordaba la buena trama, las bellas líneas generales, pero esta vez me sorprendieron mucho los buenos diálogos, todos en los que aparece el villano minero están muy bien escritos; la osadía sexual de las dos mujeres tan obnubiladas, directas y sin prejuicios, hoy dirían que están empoderadas jaja; y lo bien resuelta y acabada que está, casi perfecta en verdad.
Quizás cierta tendencia a la caricatura y la exageración, al maniqueísmo infantil, nos impidan considerarla una obra maestra, pero son pequeñas pegas que no vienen al caso cuando todo está tan bien contado y es, a pesar de su origen conocido, una historia sorprendente y arriesgada que se aleja con valentía del molde o matriz inicial y que mezcla elementos antagónicos con mucha destreza y pericia.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
Digámoslo ya que no nos aguantamos: es un resucitado, un aparecido, un enviado del más allá por el mismo Dios (¿o un diablo intruso y benevolente por el contrario, tal vez?), que había escuchado los ruegos de la preciosa muchacha y decidió ayudarla con Clint. Es, también, un ángel exterminador muerto hace mucho tiempo a manos de Stockburn y que, a la par que ayuda a la buena gente, se cobra su merecida revancha. De ahí que en él se acumulen todos los opuestos, predicador y asesino, muerto y vivo, casto y amante bandido, asceta y bebedor (nunca antes de las nueve de la mañana), bondadoso y despiadado, más allá y más acá, rezo y sangre, sexo y muerte.
Tanto el comienzo como el final son maravillosos. Al principio, varios caballos galopando furiosamente, al final, él solo se aleja mientras ella, la joven prendida de su hechizo santo/siniestro, le llama y le llora y le canta y le ama, tanto.
Muchas más cosas:
- Cuando la niña ora y apunta, contradice su plegaria, se reivindica.
- Cuando el predicador enciende a las dos mujeres, ambas hermosas (una rubia y otra morena, una madura y otra púber), las encela y excita, las confunde y altera, pobres.
- Cuando pasa la noche con ella. El guerrero se purifica y purga en el altar de la carne y lo femenino antes de la batalla definitiva (como el grupo más salvaje hizo en su día antes de la matanza final), antes de la sangre y la barbarie.
- El ogro se redime. Un Frankenstein de buen corazón. Un monstruo viene a verme. Solo necesitaba un ejemplo digno para sacar a pasear su luz gigante, claro que sí.
- El careto del malo y sus ayudantes. Jonh Russell y cía. Buen casting.
- El paisaje agreste y despavorido.
- La presión hidráulica y las explicaciones del malote Penn.
- El baile moribundo/agónico con el pedrusco y la botella, en la nieve, del pobre hombre.
- La tienda de abastecimiento regida por ese matrimonio tan bien avenido.
- La cara de espanto de Stockburn cuando descubre que sí, que es él (tú... túuuu... )
Vamos, que está muy bien; que queda y deja surco en nuestra alma aterida de anhelo y frío.
Tanto el comienzo como el final son maravillosos. Al principio, varios caballos galopando furiosamente, al final, él solo se aleja mientras ella, la joven prendida de su hechizo santo/siniestro, le llama y le llora y le canta y le ama, tanto.
Muchas más cosas:
- Cuando la niña ora y apunta, contradice su plegaria, se reivindica.
- Cuando el predicador enciende a las dos mujeres, ambas hermosas (una rubia y otra morena, una madura y otra púber), las encela y excita, las confunde y altera, pobres.
- Cuando pasa la noche con ella. El guerrero se purifica y purga en el altar de la carne y lo femenino antes de la batalla definitiva (como el grupo más salvaje hizo en su día antes de la matanza final), antes de la sangre y la barbarie.
- El ogro se redime. Un Frankenstein de buen corazón. Un monstruo viene a verme. Solo necesitaba un ejemplo digno para sacar a pasear su luz gigante, claro que sí.
- El careto del malo y sus ayudantes. Jonh Russell y cía. Buen casting.
- El paisaje agreste y despavorido.
- La presión hidráulica y las explicaciones del malote Penn.
- El baile moribundo/agónico con el pedrusco y la botella, en la nieve, del pobre hombre.
- La tienda de abastecimiento regida por ese matrimonio tan bien avenido.
- La cara de espanto de Stockburn cuando descubre que sí, que es él (tú... túuuu... )
Vamos, que está muy bien; que queda y deja surco en nuestra alma aterida de anhelo y frío.