Nunca he sido muy fan de los Monty Python y eso que el humor que más me gusta es el absurdo, pero para mi opinión, en este caso, todo era tan absurdo que no me hace gracia, me gusta buscar un punto intermedio. He visto varias películas de este grupo de cómicos, entre ellas las más famosas pero ninguno me hizo "tilín". Sé que esta no se puede considerar de Monty Python aunque sea dirigida por unos de los integrantes de este grupo, el que ha muerto este año (Descanse en Paz) y aparezcan monstruos con las voces originales de los demás integrantes. En el título me refiero a que una idea tan infinita como la de dar un poder universal que permite hacer de todo, se muestra muy poco de el, se sacan pocas ideas originales y se centrar más en una historia aburrida y típica de telefilmes de sobremesa. Me gusta Pegg y muchas de las películas que ha hecho pero en esta especialmente, no se le ve entusiasmado, le falta chispa y nunca mejor dicho. Se podría haber llevado a cabo otras ideas del uso de poderes u otras formas de querer dar un mensaje final pero no es así y decepciona. Para ser sincero, solo ha sido capaz de sacarme dos carcajadas porque el resto es demasiado absurdo o demasiado repetitivo en este tipo de cine.