No es bueno repetirse tanto porque lo que fue bueno termina siendo malo o, como es este caso, mediocre. Algo que ni los muy fans pueden defender y que solo los departamentos de marketing de las distribuidoras pueden salvar a través de comentarios más o menos favorables de amigos incondicionales.
Las anteriores de la saga conseguían, en algunos momentos, sorprender pero ya no hay mucho que purgar y todo te parece como ya visto, previsible.
El cine de género no es fácil de mantener en el tiempo y obras maestras pasan a ser olvidadas por la obcecación de los productores en sacarle todo el jugo posible. ELM STREET y VIERNES 13 son ejemplos de ello.
Vista por si misma es buena pero a los que hayan visto cualquiera de las otras entregas se verá defraudado.