Haz click aquí para copiar la URL
Voto de candlebox:
8
Intriga Cuando el Estado intenta expropiar su plantación para construir una autopista, Charlotte Hollis (Bette Davis), una rica solterona del Sur que lleva treinta años recluida llorando la muerte del hombre amado, pide ayuda a su prima Miriam (Olivia de Havilland) y a su viejo amigo Drew (Joseph Cotten). (FILMAFFINITY)
2 de octubre de 2017
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Segunda obra de Aldrich dentro del género del suspenso-terror. Aquí el director vuelve a trabajar con Bette Davis, a los que se suman Olivia de Havilland, (gran amiga de Davis, así que en el set debe de haber existido menos tensión que con el dueto Davis-Crawford en "Qué fue de Baby Jane") Joseph Cotten, la tremenda Agnes Moorehead (ganadora del Golden Globe y nominada al Oscar como actriz de reparto por este filme) y mención aparte para Victor Buono que está notable al comienzo de la cinta como padre de Charlotte.
La película rodada en blanco y negro, (como "Qué fue de Baby Jane") busca repetir los réditos de aquella cinta, y tiene muy buenos momentos en gran parte gracias a las magníficas actuaciones de sus actores protagónicos, pero en la búsqueda de sorprender continuamente al espectador la cinta se alarga demasiado y allí comienza a resultar algo tediosa, sin quitarle por ello el ser una de las buenas películas dentro del género del terror, a veces algo recargada de terror sicológico. Claro que ahora es al personaje de la Davis, Charlotte, al que le toca padecer dicho terror sicológico.
La película cuenta con un comienzo que es tan extraordinario como prometedor, como para que el espectador se haga las mayores ilusiones de lo que va a ver y que en el desenlace nos aclarará que la historia no era tan así como la creíamos, pero tiene una parte central que por momentos hace demasiados giros sobre sí misma produciéndonos algún tedio, que se lima como ya he señalado al final, en que las caretas de todos los personajes caen, y con una Davis (que como en "Qué fue de Baby Jane") nos regala una última escena como para mostrarnos que al fin de cuentas la película descansaba sobre sus hombros, y que por momentos me recordó, (con las diferencias obvias,) a Gloria Swanson de Norma Desmond en "Sunset Boulevard."
"Hush... Hush, Sweet Charlotte" así como su antecesora "Qué fue de Baby Jane" (ambas de Robert Aldrich) son sin dudas dos películas que hay que buscar y darse el tiempo de ver, entre otras cosas, para reencontrarnos con un cine mucho mas inteligente que el que se hace hoy y para, a través de sus protagonistas, disfrutar con el talento de estos que nos muestran que cuando una actuación es convincente y bien lograda no es necesaria la utilización de litros y litros de tinta color sangre.
candlebox
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow