Una curiosa película de terror juvenil (considerada de culto) cuyo punto de partida la verdad si analizamos a profundidad no es nada del otro mundo y sigue los mismos tópicos del género, en donde más o menos "pasa lo que tiene que pasar", pero tiene un "no se qué" que la hace muy entretenida, divertida y en determinados momentos "mete miedo".
Lo que primero llama la atención es la estética "tosca" que maneja el director John Fawcett junto a lo artesanal de la puesta en escena que decidió utilizar y que van dotando al relato de una atmósfera "malrollera" en todo momento y poco a poco van haciendo aún más "extraña" la historia de dos jovencitas que descubrirán "por las malas" que a veces no se debe desear "tanto" una cosa, porque se puede cumplir y de las formas más insospechadas e inimaginables.
Además me sorprende ver como no "teme" mostrar algunos tramos "gore" intensos que se complementan con unos diálogos que se mueven entre lo desagradable, lo incómodo y lo mundano entre las protagonistas (estupendas Emily Perkins y Catharine Isabelle). Y lo segundo claro, es evidente las metáforas varias de lo que se nos esta contando, como el subtexto de "coming of age" pero desde punto de vista "licantropo" y muy femenino, o el peligro de una vida sexual desenfrenada (especialmente entre los jóvenes), la aceptación de ser diferente, etc.
Del reparto también se dejan ver Kris Lemche, Jesse Moss, John Bourgeois, Peter Keleghan, Danielle Hampton, Christopher Redman y por supuesto Mimi Rogers, la ex-esposa de Tom Cruise.
spoiler:
El final es bastante ambiguo, ese abrazo entre hermanas, ambas infectadas con el virus "licantropo", una completamente transformada y la otra no (todavía). Solas en su casa después de haber cometido varios asesinatos.