159/12(24/10/14) Excelente debut en la dirección de largos del británico Roland Joffé, con este drama épico de amistad, supervivencia, constancia, y mucha crueldad, en medio de un conflicto bélico desgarrador. Apoyado en hechos reales, narra sólidamente la relación entre un periodista americano y uno camboyano en medio de la guerra civil que asoló el país asiático a mediados de la década de los 70. El guión del también principiante Bruce Robinson (“Creadores de sombras”) se basa en un reportaje “Death and Life of Dith Pran: A Story of Cambodia”, publicado en 'The New York Times Magazine' el 20 de enero de 1980, de Sydney Schanberg, por el que ganó el Pulitzer, trabajo que hizo tomar conciencia al mundo de los horrores que padecían en esta nación de Indochina, donde se instituyó el más salvaje sistema de reeducación de la Historia, donde todo lo que oliera a la más mínima cultura era penado con la muerte, el “único” sistema de vivencia sería el campo, la familia sería veneno, y bajo el Imperio del Terror de Pol Pot se estableció un sistema de lavado de cerebros sanguinario, que hoy día se cifra en más de 3 millones de ejecuciones, para Camboya que hoy día tiene 13 millones de habitantes, un Holocausto en semi-clandestinidad, el periodista dijo sobre Camboya <Como nación empujada a la guerra por otros poderes, no tuvo el control de su destino, siendo utilizada cruelmente como carne de batalla, sus agonías en gran medida fueron ignoradas, el mundo estaba centrando su atención en la vecina Vietnam.>. Ganó 8 premios Bafta, estuvo nominada a 7 Oscars (incluyendo film, dirección y guión), ganando 3, el impresionante Haing S Ngor, como secundario, fotografía de Chris Menges y montaje de Jim Clark. Sinopsis omitida por límite caracteres.

El guión y la buena dirección de Joffé saben crear un increscendo dramático de enorme intensidad, entremezclando inteligentemente las dos historias, la intimista de la amistad entre Dith y Sydney, llevada sin maniqueísmos, ni sensiblerías facilonas, y la del contexto bélico, exponiendo con crudeza la degradación moral de nuestro mundo, exhibiendo con rotundidad un Hermoso canto a la vida, a la amistad y al periodismo, tratado con alto grado de autenticidad, rozando el docu-drama, transmitiendo una atmósfera que se va viciando y asfixiando al espectador en su evolución. La historia está partida en dos, en la primera se forja la camaradería en el sufriente curro de corresponsal de guerra, se produce en tenso tramo en la embajada, con “las hienas” de Pol Pot esperando en el exterior, y con los compañeros de Dith intentando salvarle de Averno, solo necesitan una “puñetera” foto, subyugantes y trepidantes estos minutos, y llega la segunda parte, los compañeros están separados, aunque aparece Sidney, el gran protagonista es Dith Prang, Impactante su odisea personal, el rimo se ralentiza, apenas se habla, el poder de la imagen nos absorbe, la sinrazón fanática reina, los camboyanos son esclavos de un régimen tiránico, donde los niños pasan a ser “robots” sin alma., componiendo Joffé momentos estremecedores, que producen escalofríos.

Sam Waterston raya a una gran altura, aportando a periodista comprometido, con matices, con aristas, con complejidad interior, sabe dar rabia, ilusión, emoción, frustración, y posee una enorme química con Haing S Ngor, haciendo muy veraz su relación. John Malkovich en su poco tiempo borda su racial fotógrafo, dotándolo de mucha empatía y fuerza. Julian Sands cumple con suficiencia.

El que está sublime es Haing S Ngor, apabullante su actuación, muy sentida, aportando tridimensionalidad, vitalidad, y mucho sentimiento. No era actor, siendo el primer novel en ganarlo desde 1946 (Harold Russell en “Los mejores años de nuestra vida”)fue descubierto por la directora de casting del film, Pat Gold, en una boda camboyana en Los Ángeles. Su vida se funde con la del personaje que interpreta, antes de la llegada de los Jemeres Rojos al poder en Camboya en 1975, laboraba de ginecólogo en la capital, Phnom Penh, cuando el siniestro Pol Pot tomó el poder por su origen chino fue enviado junto a su esposa a los mortales campos de trabajo, ella falleció durante un parto, no pudiendo asistirla él, pues se hubiera sabido era doctor, y habrían matado a los 3, teniendo que ocultar su educación, estuvo padeciendo 4 años torturas y hambre, hasta que terminó el reinado del terror, entonces trabajó de médico en un campo de refugiados en Tailandia, viajando a USA en 1980, no volvió a casarse ni a ejercer de médico, en 1988 escribió Haing Ngor: A Cambodian Odyssey, describiendo su vida bajo el régimen de los Jemeres Rojos en Camboya. El 26 de febrero Ngor paseaba cerca de su residencia en Los Ángeles, cuando 3 miserables le tirotearon letalmente, fueron juzgados, los fiscales dijeron fue un robo, Ngor les dio su rolex de oro, pero cuando se negó a darles su medallón le balearon, el medallón contenía una foto de su esposa fallecida, otras informaciones indicaban que fue por orden de los Jemeres Rojos. Curiosamente Ngor tras el estreno del film dijo <Si llego a morir de ahora en adelante, no hay problema! Esta película durará cien años>, Dith Pran , dijo sobre la muerte del actor que "Él es como un gemelo mio... Él es como un co-mensajero y ahora estoy solo". (CONTINUA EN SPOILER POR FALTA DE ESPACIO)