La película en sí deriva en una historia de amor algo manida. Pero más allá de ella, nos deja una sensación de reflexión realmente interesante:
-¿qué pasaría si realmente sabemos que vamos a morir todos en 3 semanas?

Lo mejor de la película es que no esperas, desde el minuto 1, que haya solución milagrosa posible: ya se ha intentado todo, no ha funcionado, abandone toda esperanza.
Entonces... ¿qué queda?
Me pasé casi toda la película mirando los detalles: la pareja me parecía una historia por un lado totalmente ajena a mi, y veía las reacciones de la gente al fondo: el tipo que paga a otro para que lo mate antes del cataclismo, los noticiarios, los tumultos, los que intentaban hacer algo para salvarse (los soldados que preparaban su búnker), los desesperados, los que "si nos vamos a morir, quememos hasta el último cartucho"...

Me quedé mucho tiempo después de la película pensando en toda esa situación.