El enchufado triunfó en los moviditos 80-90 llevando al cine sus líos de faldas. Con Glenn Close y Demi Moore las pasó putas, las 2 estaban locas, pero con Sharon Stone la cosa cambia. La historia aquí no trata de un desliz de este crápula, no nos encontramos con la típica canita al aire de Michael que le sale cara. No, aquí él sabe que la tía es una psicópata que está loca de atar, lo que pasa es que ese cruce de piernas le pone todo verraco y le da igual 8 que 80, sus bajos instintos afloran y no hay Dios quien lo pare. Sí, él es el inspector encargado de resolver macabros asesinatos en los que la rubia es la principal sospechosa, pero también es Michael Douglas, y la cabra tira al monte. Lo cierto es que no sorprende, si con Glenn Close no dudó en poner en riesgo su trabajo y familia, qué no hará por irse a la cama con la más sexy de entre las sexy.

Por mí estas historietas del mujeriego podrían haber seguido con más y más entregas, me entretiene ver al enchufado pasándolas canutas con la loca de turno. Al final nos quedamos con 3 en la que Intinto básico se queda con la medalla de oro.

Gran Michael e inigualable Stone.