He visto todas las películas de la saga el día del estreno, sin excepción, y esta vez me he aburrido muchísimo. En las otras no me ha pasado, me han entretenido hasta el final. Sin embargo, esta es un poco tostón. Sí es cierto que los personajes principales adoptan en algunos momentos comportamientos cómicos que te hacen soltar una carcajada (algo inusual en las anteriores entregas), pero resulta insuficiente para poder disfrutar de una película de dos horas y media. Es lenta, sin rumbo fijo y sin grandes escenas dignas de recordar (salvo una que no puedo contar). Este Harry Potter es diferente, insípido, le falta algo. Si sois fans podéis ir al cine a pasar el rato, pero si el señor Potter ni os va ni os viene... no pasa nada porque aparquéis la película hasta que salga en DVD para verla una tarde de lluvia en casa.